Durante su presentación Mesquita expuso que la inflación se recrudece de manera global y afecta a todos los países. Entre los factores que afectan negativamente a la economía mundial, el economista mencionó a la guerra entre Rusia y Ucrania y como antecedente a este acontecimiento, la prolongada sequía, lo cual cobra mayor relevancia para Paraguay.
“La economía mundial ya venía con un proceso inflacionario y ese proceso empeoró con la guerra y el alza de precio de los commodities como el petróleo, soja, maíz y trigo, gasolina, diésel”, citó.
No obstante, el economista evaluó que el conflicto bélico acabaría en 2023, debido a las sanciones impuestas a Rusia. “Al terminar la guerra, los precios de los commodities se acomodarán, pero seguirán en niveles altos, no al nivel del 2019 o 2020, ya que la oferta no se normaliza tan rápido”, agregó.
Agregó que casi todos los países del hemisferio tienen una inflación muy alta, por encima de la meta. En cuanto a bienes y servicios, señaló que todos los precios están al alza. En los bancos centrales, también todos están con incremento del tipo de interés.
“El tipo de interés al alza implica un riesgo de recesión para fines del 2023 en EE.UU.; el 8% para EE.UU. es mucho más que para nosotros 10%. No están acostumbrados y las expectativas están al alza”, apuntó.
Posteriormente, Mesquita se refirió a China Continental, que experimentó picos de crecimiento en 2020 y hoy se recupera de una demora logística por los vestigios de la pandemia. Resaltó que el gigante asiático es la fábrica del mundo, por lo que su rol es vital en el acomodamiento global.
Según el analista económico, se estima un crecimiento global del 3% para el 2023. Mientras que en EE.UU. se proyecta un 2%, la Eurozona un 2% y China 5%.
Proyección Paraguay
Mesquita estimó que Paraguay repuntará su economía para el 2023, movida por el sector primario, con una recuperación del Producto Interno Bruto (PIB) del 5%. Esto es comparativamente mejor a otros países de la región, como Colombia (2,3%), Argentina (2,5%) y Brasil (3%).
Si bien este año habrá una contracción del 1% negativo, aunque la sequía afectó los resultados del primer trimestre del año, pero considerando que estos fenómenos son cíclicos, se espera una mejora en la cosecha de los principales commodities (soja, maíz, trigo, carne) que marcan el ritmo macroeconómico del país.
Además, se descartaría una nueva sequía para el 2023, cuando se prevé el fin del proceso de presión al tipo de interés bancario, por lo que los efectos disminuyen gradualmente.
“Hay una economía urbana que viene bien, pero el sector primario es el que da más volatilidad a la economía del Paraguay, para abajo y para arriba”, aseveró.
Asimismo, conforme a las proyecciones, el dólar se perfila al alza en el país, llegando a G. 7.122 para el 2023 en Paraguay.
El economista también destacó la estabilidad de deuda fiscal del país, que junto a Perú y Chile se halla entre los de menor deuda. Mientras que Brasil y Argentina poseen mayor índice de deuda fiscal, esta última valuada en dólares.
Con relación al impacto que pueda generar el gasto público en un año pre electoral, Mesquita aseguró que este parámetro no influye demasiado en las cifras globales.
En este sentido, Paraguay se erige como un terreno atractivo para las inversiones extranjeras, sobre todo para los países vecinos como Argentina y Brasil.
“Paraguay repuntará su economía para el 2023, movido por el sector primario, con una recuperación del PIB del 5%”
De acuerdo al análisis y proyecciones de Mario Mesquita, economista jefe de Itaú Unibanco, las perspectivas positivas se observan a largo plazo, pero en lo que resta del año, la inflación impactará a nivel mundial.