Las falencias halladas mediante el proyecto T-FAST son el déficit en infraestructura aeroportuaria, burocracia y falta de actualización en la implementación de normas y resoluciones, poca incorporación de tecnología e innovaciones en torno al intercambio aéreo.
El proyecto busca mapear el sistema tanto de exportación como de importación aérea. En primer término, reunirá al sector privado y público, actores del comercio internacional y la cadena logística que operan diariamente.
La mejoría de dichos puntos ayudará a optimizar la competitividad de Paraguay en la región en la modalidad aérea, según indicó Camila Candia, coordinadora del proyecto a nivel local.
Expresó que “es una de las modalidades que menos se utiliza” y ejemplificó el caso de los arribos farmacéuticos que requirieron urgencia en el contexto sanitario, como las vacunas anti COVID-19.
“Hay rubros muy representativos como el farmacéutico que operan en esta modalidad y son los rubros más afectados por la falta de infraestructura”, aseveró.
Lo que se pretende es poner en la mesa la propuesta al sector público y luego consensuar las soluciones para la implementación y ejecución de las mismas. Las propuestas finales se presentarán el 3 y 4 de mayo al sector público. Luego en junio, iniciará el proceso de puesta en marcha de lo acordado.
“Tener un aeropuerto más moderno, procesos más eficientes. Simplificar y reducir los costos y los tiempos que las empresas demoran en la exportación de sus cargas, o bien la importación de sus insumos para poder elaborar sus productos”, detalló.
El proyecto Sistemas y Tecnologías Agrícolas para Facilitar el Comercio en Paraguay (T-FAST) es un proyecto financiado por el Departamento de Agricultura de los Estados Unidos de América (USDA) e implementado por el IESC en Paraguay. El relevamiento de datos para T-FAST demandó tres. El mismo se canaliza a través de la Cancillería y la Unión Industrial Paraguaya (UIP).
El relevamiento de datos se realizó mediante la implementación de una metodología desarrollada en seis sesiones de trabajo realizadas entre los meses de marzo y abril, en las que participaron más de 35 actores, entre empresas y gremios privados, quienes trabajan en la cadena logística del proceso de exportación.