En el cuarto trimestre del año pasado Itaú registró un resultado recurrente (el margen de intereses y las comisiones) de R$ 7,2 mil millones, lo que significó un aumento del 32,9% respecto al mismo período del año anterior, con un retorno recurrente sobre el patrimonio neto promedio anualizado del 20,2%.
En cuanto al beneficio anual, en 2021 ascendió a R$ 26.879 millones, es decir, un 45% más que en 2020, cuando la utilidad final fue de R$ 18.536 millones. Entre los factores que más influyeron en los resultados están el crecimiento del margen financiero con clientes, impulsado por un volumen de crédito mayor y el cambio de mix de productos, con más crecimiento relativo de productos con mejores spreads.
Asimismo, el aumento de los ingresos por prestación de servicios en razón de la mejora en la actividad económica y del consiguiente crecimiento de los ingresos con tarjetas, también influyó en los resultados.
De acuerdo a lo divulgado por la entidad bancaria, otro punto a resaltar es que sigue al alza la relevancia de los medios digitales para atraer y atender a sus clientes. En el cuarto trimestre de 2021, un 63% de las contrataciones de productos por personas físicas se realizaron digitalmente. El NPS de la Super App (canal móvil para persona física) llegó a 71 puntos en diciembre.
En cuanto al banco digital de Itaú, este superó el listón de 14,6 millones de clientes -4,7 millones de ellos se consiguieron en el cuarto trimestre de 2021-, de los cuales un 86% no tenía una relación previa con el banco.
Por su parte, la cartera de crédito total, que incluye garantías financieras prestadas y títulos privados, creció un 18,1% respecto al cuarto trimestre de 2020 y llegó a R$ 1,027 mil millones en diciembre de 2021, un récord para el banco.