El ICC del Banco Central del Paraguay (BCP) de julio cerró con 42,6 puntos, registrando una caída de la recuperación obtenida en junio, donde el indicador se ubicó en 46,4 puntos, cuando el nivel neutral es 50.
El índice está constituido por la Situación Económica y las Expectativas Económicas, que sufrieron reducciones de 3 y 5 puntos, respectivamente, lo cual ubica a ambos componentes en 22 y 62 puntos. Cabe resaltar que tanto para la Situación Económica como para las Expectativas Económicas el nivel neutral es de 50 puntos.
Uno de los sectores importantes para la reactivación del consumo definitivamente es el de la construcción que, si bien prácticamente no paró durante las distintas fases de la cuarentena, está pendiente a lo que pueda ocurrir en lo que resta del año.
“Luego de la nota −solicitando cancelar las licitaciones en curso y futuras para el 2020− enviada por Hacienda al MOPC nos encontramos con que las obras financiadas por fondos locales se podrían postergar. Preocupa principalmente las que están en ejecución porque las empresas deben cobrar lo invertido, ya que muchas sacaron créditos para operar”, afirmó Paul Sarubbi, presidente de la Cámara Vial Paraguaya (Cavialpa).
Según el titular de Cavialpa, el sector de la construcción debe tener previsibilidad en las obras, por lo que esperan que exista un consenso entre el Poder Ejecutivo y el Congreso para obtener recursos y que el volumen de las construcciones no se reduzca. “Somos conscientes de que tributación tuvo una reducción en sus ingresos desde el inicio de la pandemia, aparte de que el Estado tuvo que realizar gastos no previstos como los programas sociales. No obstante, las obras no deben parar porque actualmente estamos con 300 contratos y 90.000 personas trabajando”, indicó Sarubbi.
Asimismo, el presidente comentó que las obras financiadas con recursos propios –no con endeudamiento– son las que comúnmente se adjudican a las empresas más pequeñas, “que poseen menos espalda financiera para soportar contratiempos económicos. Como a inicios del 2020 se licitó muchísimo, las empresas compraron equipos, contrataron mano de obra nueva y la capacitaron. La pandemia nos afectó en un principio, pero el MOPC decidió que las obras no paren y definitivamente fue una medida acertada”, acotó.
Reducción de la confianza es multifactorial
“El aumento de los casos de COVID-19 puede ser uno de los factores que expliquen la reducción de la confianza de los consumidores, principalmente porque departamentos como Alto Paraná, Central y Asunción son los que concentran mayor cantidad de población”, consideró el economista jefe del BCP, Miguel Mora, quien además señaló que la respuesta de los agentes económicos consultados para el ICC puede estar condicionada por diferentes factores, como la situación sanitaria, las medidas tomadas por el Gobierno para reactivar la economía y otros aspectos que afectan a la confianza para comprar y/o invertir.