Lo que parece la última moda entre las grandes marcas de tecnología despertó el interés de algunos grupos de investigación hace algunos años. "Estábamos interesados en acercar este tipo de interfaces a la vida real. Especialmente dentro de casa, dónde vive la gente y es algo que todos conocemos", explica Luis Yoichi Morales investigador del centro de investigación nipón ATR (Advanced Telecommunications Research). Así es como nació el proyecto BMI House, un ambicioso plan para crear casas inteligentes con la ayuda de una prometedora tecnología llamada interfaz cerebro-máquina (BMI, en sus siglas en inglés). Este tipo de tecnología se basa en un conjunto de sensores que se encuentran adheridos a un gorro o casco. Estos sensores, son capaces de medir las diferencias en el campo eléctrico generados en ciertas partes del cerebro. Una vez se analiza la información que proviene de ellos, se pueden deducir conceptos tales como estados de ánimo, niveles de estrés e incluso decisiones simples (encendido/apagado, derecha/izquierda, etc...).
Los investigadores detrás del proyecto, iniciado hace 3 años, decidieron centrarse en estudiar los posibles beneficios de esta tecnología para aumentar la autonomía de personas con discapacidades. En Japón, más de 5 millones de personas mayores sufren de algún tipo de incapacidad funcional. En España, el 74% de las personas con discapacidad afirman tener dificultades para las actividades básicas de la vida diaria. Aumentar el tiempo que estas personas pueden mantenerse activas en sus propias casas, aumentando su autonomía, es uno de los grandes retos tanto de asociaciones de pacientes como gobiernos.
Cuando la casa cuida de ti
Hace unos años, cambiar el tipo de música según tu estado de ánimo o medir las calorías que has consumido a lo largo del día, parecía sacado de una película de ciencia ficción. Sin embargo, una nueva generación de dispositivos vestibles (wearables), han entrado con fuerza en el mercado para dar voz a nuestros cuerpos...