Pero han cobrado sentido esta mañana en Londres y en Yakarta (Indonesia), donde el fabricante de móviles ha presentado el terminal con el que da un giro y salta a la conquista de la gama media. El X es un smartphone que hereda algunas de las especificaciones del primer modelo de la marca, el One, y que llega con una curiosa sorpresa: contará con una versión de cerámica.
El proceso de fabricación del material, según la marca, dura 25 días, y comienza con un molde de zirconita de solo 0,5 milímetros de grosor. La empresa ha explicado también que la cerámica se cuece a casi 1.500 grados durante 28 horas y se deja enfriar durante dos días. Luego, cada cuerpo del X pasa por tres procesos de pulido diferentes, hasta que no tiene ninguna imperfección.De cada 100 cuerpos cerámicos que han fabricado, solo 20 pasan los controles de calidad.
El resultado es un material con una dureza de 8,5 en la escala de Mohs, equivalente al topacio, que es resistente a ralladuras. A pesar de ello, el X de cerámica solo pesa 160 gramos. Y más liviana es todavía la versión en cristal negro, llamada Onyx. El terminal más ligero y fino de OnePlus pesa 138 gramos.
Un nuevo móvil de cerámica quiere asaltar la gama media
"No nos consideramos una marca china, sino una empresa global". Teniendo en cuenta que su cuartel general está en Shenzhén y que sus terminales se fabrican en las instalaciones de la compañía china OPPO en Dongguán, las palabras del cofundador de OnePlus, Carl Pei, pueden sonar a bravuconada...