En setiembre del año 2011, Paraguay perdía su estatus sanitario por un brote de fiebre aftosa, situación que derivó en la suspensión de los envíos de carne bovina a varios países del mundo, entre ellos Arabia Saudita, Emiratos Árabes, Kuwait y Catar (Península Arábiga). Hoy, después de casi nueve años, nuestro país volvió a exportar al mercado saudí, luego de quedar formalmente habilitado en enero pasado, proceso que duró más de dos años, dadas las estrictas verificaciones que el país aplica para el ingreso de productos cárnicos.
La primera embarcación de carne vacuna partió rumbo a Arabia hace unas semanas a través de la firma Frigomerc. En total, fueron enviadas 12 toneladas por vía fluvial. La Cámara Paraguaya de Carnes (CPC), destacó el hecho e informó también sobre la posibilidad de realizar envíos de carne fresca por vía aérea, por lo que esperan un aumento en el volumen de acuerdo a la demanda, en los próximos meses.
Para los industriales, con la recuperación de este mercado, Paraguay tiene la oportunidad de diversificar los destinos de envíos de cortes de carnes traseros y finos, utilizados especialmente en las grandes industrias de la península arábiga.
“El sector ve con mucho entusiasmo el retorno al mercado de Arabia y el aumento de los envíos, especialmente por la pandemia, situación que golpeó a las exportaciones de carne de Paraguay, así como a otras industrias en el mundo”, manifestó Luis Pettengill, presidente de la CPC.
Según datos de la CPC, Arabia Saudita es un mercado que importa alrededor de 5.000 toneladas de carne vacuna al mes, que al año constituyen unas 60.000 toneladas. Sus más grandes proveedores son Brasil, con un 70% de la cuota de mercado, Australia con el 20% y otros países con porcentajes inferiores.
Actualmente, los principales compradores de la carne paraguaya son: Rusia, Chile, Israel, Taiwán, Brasil, Vietnam, Kuwait, Líbano, Países Bajos y Uruguay.