“El crecimiento se fue consolidando con los años, permitiéndonos pasar de un país consumidor de productos importados a posicionarnos como uno de los países exportadores con mayor índice de progreso, en torno a la producción. Para esto fue fundamental la expansión de la superficie de cultivo y la apuesta a la industrialización, mediante las inversiones del sector privado”, explicó Heisecke.
Sobre el posicionamiento de Paraguay entre los 12 productores principales a nivel internacional, comentó que si bien es un logro compartir la lista con países de vasta trayectoria en el rubro, “aún se debe continuar expandiendo la producción y seguir con las inversiones para no detener el desarrollo actual”, agregó.
“En las proyecciones de exportación para esta nueva temporada podríamos manejar números similares a Brasil, y esto es importante, porque el arroz es un rubro relativamente nuevo, que está dando sus primeros pasos”, afirmó.
Otro aspecto importante, de acuerdo a Heisecke, es que de depender casi exclusivamente de Brasil para las exportaciones de arroz, actualmente se comercializa un 40% a otros mercados, y la meta es alcanzar el 60% fuera de ese mercado.
En relación con los números proyectados para la temporada 2020-2021, el titular manifestó que no se tendrá mucha variación, ya que se mantuvo las 165.000 hectáreas de cultivo, aunque el rendimiento aumentó levemente.
“Esto permitiría alcanzar una producción de 1.200.000 toneladas de arroz, de las cuales 200.000 toneladas permanecen en el mercado interno y el resto va a la exportación. Un 90% de esta exportación va industrializada”, sostuvo.
Por último, Heisecke remarcó que se están impulsando interesantes proyectos a través del sector privado, lo que incidirá en la evolución de la industria, sin embargo, estará sujeto al comportamiento del sector arrocero en el mercado internacional.