El principal argumento a favor de mantener el horario de verano radica en las implicancias de seguridad. Al no atrasar la hora, se mantiene una hora más de luz solar durante la tarde, lo que coincide con la salida de las oficinas del sector privado. Esta hora adicional de luz es crucial para quienes regresan a sus hogares o se dirigen a universidades y otros destinos, mejorando la visibilidad en el transporte público y en las calles.
"El hecho de tener más luz solar en horas pico de tránsito no solo reduce la probabilidad de accidentes, sino que también disminuye las oportunidades para que ocurran delitos. Los delincuentes prefieren operar en la oscuridad, y una hora más de luz puede ser un fuerte disuasivo", subrayó Canova.
La seguridad en el transporte público es una preocupación constante. Las paradas de autobuses y otros medios de transporte son puntos vulnerables para delitos. Para Canova, con más luz natural, las personas se sienten más seguras esperando y transitando, lo que mejora la percepción general de seguridad en la ciudad.
Desde una perspectiva económica, Canova dijo que el horario de verano trae consigo beneficios importantes. Con una hora adicional de luz solar, la dependencia de la electricidad disminuye significativamente. Esto se traduce en ahorros tanto para los hogares como para las empresas.
"Al mantener el horario de verano, se reduce el consumo de energía en iluminación exterior de oficinas y hogares", explicó Canova. "Esto no solo representa un ahorro económico, sino que también contribuye a la sostenibilidad ambiental al disminuir la demanda energética", agregó.
Además, la unificación horaria con otros países de la región que no realizan cambios de horario facilitará el comercio y las comunicaciones. El analista añadió que Paraguay se alineará con estos países, estableciendo un parámetro horario estándar durante todo el año.
Sin embargo, no todo es positivo. Un posible inconveniente es la exposición de niños a la oscuridad durante las primeras horas de la mañana. Con el nuevo horario, muchos niños podrían estar en movimiento hacia sus escuelas antes del amanecer, lo que plantea un desafío en términos de seguridad.
"Este es un punto a considerar", admitió Canova. No obstante, dijo que los beneficios de mantener el horario de verano superan estos contratiempos. "La propuesta anterior en el periodo legislativo no obtuvo los votos necesarios, pero ahora, con un análisis más profundo, se logró ver la conveniencia de esta medida", recordó.
Por último, argumentó que mantener el horario de verano refleja un enfoque equilibrado entre seguridad pública y eficiencia económica. "Resta por ver cómo se implementará esta medida y si cumplirá con las expectativas de mejorar la calidad de vida de los ciudadanos paraguayos", finalizó.