Carla Bacigalupo se desempeñó en el Ministerio de Justicia como directora general jurídica, después como viceministra y finalmente como ministra. Estando en la institución comenzó a trabajar en distintos proyectos para la reinserción social de las personas dentro del sistema penitenciario. De ese trabajo mancomunado con distintos actores de la sociedad salieron proyectos tan valiosos como la marca MUA, brindando oportunidad de empleo y capacitación a internos e internas, y allanando el camino para lo que les espera una vez están fuera del sistema.
P. ¿Cuáles son los comienzos de Metas Paraguay?
R. Nosotros trabajamos en reinserción social desde hace un tiempo ya, cuando estuvimos en el Ministerio de Justicia. En aquel momento desarrollamos varios proyectos de reinserción social basados en la capacitación y en el empleo de las personas que están en contexto de encierro.
En Paraguay el sistema penitenciario sigue encerrando pobreza, seguimos castigando al eslabón más débil de la sociedad, porque estas personas tienen escaso nivel de educación y muy bajos recursos. Lo que generalmente hacemos como sociedad es atacar el síntoma que es la delincuencia, y no el problema de fondo.
P. ¿Es ahí donde Metas Paraguay interviene? ¿En la raíz del problema?
R. Efectivamente. Nuestros proyectos van dirigidos directamente al problema: la falta de oportunidades, un sistema de justicia afectado por una grave mora judicial, una dilación en los procesos, una falta de defensa porque los defensores públicos en Paraguay no dan abasto, etc. Nosotros lo que pretendemos es instalar herramientas para favorezcan la reinserción social de estas personas.
Metas Paraguay tiene tres ejes estratégicos: Reinserción social, problemas de género, en especial todo lo relacionado con la violencia hacia la mujer y por último, emprendedurismo.
Nuestro trabajo con las personas dentro del sistema penitenciario ha dado sus frutos. Y gracias a todo ese impuso, hace unos meses se conformó la primera asociación de ex internos e internas. Porque esas personas mientras están dentro del sistema se están capacitando y las que forma parte de los programas de reinserción tienen trabajo, pero qué pasa con las que salen del sistema.
Pues que no tienen alternativas, no tienen oportunidades, no tienen empleo, no pueden seguir con la capacitación que tenían dentro. En otros países estas personas entran dentro del programa de patronatos de liberados, pero aquí no existe. Entonces se conformó la asociación EXI con Dignidad, y un grupo de personas que estamos trabajando desde el año 2014 en Metas Paraguay fue invitado por esta asociación para integrar en conjunto un proyecto de reinserción social de personas que están fuera del sistema penitenciario. Y en eso estamos.
P. ¿Cuáles son los proyectos en los que se encuentra trabajando ahora la Fundación?
R. Metas Paraguay impulsa proyectos de reinserción social con EXI con Dignidad y otras asociaciones de ex internos que están conformándose en el interior del país, para estas personas que salen del sistema penitenciario. A través de bolsas de empleo, de procesos de capacitación, a través del emprendedurismo.
Imagínate lo difícil que es emprender para una persona que sale del sistema. Nosotros los acompañamos en las ideas, el diseño, hacemos intermediación con algunas entidades financieras para microcréditos. Hemos hecho alianzas estratégicas con distintos actores de la sociedad. Hicimos el primer almuerzo solidario pro inserción social hace poco, recaudamos fondos para comprar dos máquinas de talabartería para el primer taller de reinserción social en el local de EXI. Hoy ya tenemos gente trabajando allí y empezando a producir muestras de termos y otros productos de cuero, porque aún estamos en esa etapa.
La idea es lanzar toda una línea productiva y que la gente que está trabajando hoy en las cárceles, tenga esa oportunidad de seguir produciendo una vez que salgan, sin cortar el ciclo de producción, en un taller que está formado hoy por hoy en forma modesta y humilde en el local de la asociación.
Ahora tenemos 4 becados en la CEPROCAL, hay personas del programa empleadas en distintos puestos, tenemos el taller de producción iniciando a solo 4 meses de haber iniciado este proyecto.
También lanzamos un programa de voluntariado para distintos profesionales que quieran sumarse, ya somos unos 35 los inscritos entre médicos, asistentes sociales, abogados, psicólogos, voluntarios que van a brindar sus servicios profesionales de manera gratuita a estas personas.
P. ¿De qué manera esta labor afecta positivamente, no solo a las personas dentro del sistema penitenciario, sino a toda la sociedad?
R. Toda la sociedad tiene que entender que dar oportunidades a personas egresadas del sistema penitenciario es apostar por una sociedad más segura. El Estado no tiene la capacidad de absorber toda la mano de obra egresada del sistema y de dar una oportunidad a cada uno, porque tenemos más de 13 mil personas dentro del sistema. Tenemos que crear conciencia ciudadana para que realmente seamos coherentes y tomemos cartas en un asunto que sí nos afecta a todos, directa o indirectamente.
Teníamos una tasa de reincidencia del 70% que se ha visto reducida ligeramente, gracias a este tipo de proyectos, pero podemos reducirla mucho más en la medida en que se vayan generando oportunidades para estas personas.
Si la marca MUA representa el trabajo realizado dentro de las cárceles, lo que se propone ahora Metas Paraguay, con las asociaciones de ex internos, es ser la semilla del patronato de liberado, articulando la suma de varios sectores que presten asistencia y oportunidades a las personas egresadas del sistema, y quiero decirte que esto ha trascendido, hoy nos llaman personas de empresas nacionales que nos dicen: nos pueden asesorar por favor porque queremos sacar una línea de ropa con sentido social. Ya nos piden que nuestra mano de obra elabore productos para tal marca con una línea social. Ese es el cambio que queremos impulsar. Que marcas nacionales digan yo quiero lanzar un producto que le de mano de obra a un sector vulnerable como este.
Los pilares de este proyecto son la capacitación y el empleo. No queremos filantropía, ni apelar a la pena, sino generar oportunidades concretas.
P. ¿De qué manera puede el sector empresarial apoyar esta causa?
R. Los empresarios que quieran colaborar con el proyecto lo pueden hacer a través de tres acciones concretas:
-Abrir sus puertas para emplear a personas egresadas del sistema penitenciario.
-Comprar los productos elaborados en el marco del proyecto, que son productos de talabartería y de confección.
- O encarando proyectos productivos, por ejemplo, que quieran lanzar alguna marca o línea de producción contratando mano de obra del proyecto.
P. Mencionaste que Metas Paraguay también se ocupa de problemas de género.
R. Como sabrás el género en Paraguay está bastante castigado. Existen muchos flagelos, para empezar la violencia. 5 de cada 10 mujeres son víctima de violencia machista y estas son solo las cifras registradas. El número dos es el desempleo. De 80.000 personas sin empleo 50.000 son mujeres. En el interior del país sobretodo hay un problema con el acceso a la educación. Las mujeres se quedan embarazadas muy jóvenes, dejan el colegio para poder cuidar de sus hijos y por supuesto, tampoco acceden al empleo. Por último, una escasa participación de la mujer en cargos gerenciales y de poder, lo que hace que se escuche menos nuestros problemas. Todo esto está interconectado. Y por ello estamos trabajando en un programa de capacitación a diversos sectores, con la finalidad de empoderar a la mujer. Queremos además, formar una asociación de mujeres, a nivel país, que sirva para darnos cierta contención en especial para las víctimas de violencia. Es un trabajo grande, en conexión con los servicios públicos que hoy día ofrece el Estado, pero que no son suficientes.
Queremos asimismo impulsar emprendedurismo femenino, la idea es dar herramientas de empoderamiento a la mujer para que pueda superar todas las barreras: violencia, desigualdad, falta de oportunidades etc.
Hoy estamos en la etapa de capacitación y como te mencioné, estamos conformando una red de referentes en el país para que las mujeres puedan sumarse de a poco.