Y como los europeos que participaron en la reunión no demostraron intenciones de ceder, los sudamericanos ya creen que un consenso no va a ser posible.
Siete ministros de los países del Mercosur fueron a Bruselas (Bélgica) el pasado lunes 9 de julio, para iniciar una nueva ronda de negociaciones y con un mandato político para cerrar un acuerdo “equilibrado”, lo que, para el bloque sudamericano, significaría una reducción de las exigencias hechas por los europeos en la parte agrícola.
Los ministros del Mercosur dijeron que estaban dispuestos a mejorar la propuesta ya presentada para temas en que los europeos exigían mayores ventajas, como reducir el plazo para “cerar” tarifas en la venta de automóviles al bloque. También podrían aceptar una lista de productos con “denominación de origen”; con eso, productos como el queso parmesano y el coñac sólo podrían ser vendidos bajo esos nombres si hubieran sido hechos en las regiones europeas en que fueron creados.
Pero los sudamericanos dejaron claro que cualquier negociación estaría condicionada a la mejora de la propuesta agrícola de la Comisión Europea. “No encontramos la misma disposición del lado europeo, el equilibrio no existe. El escenario no es muy animador”, admitió un participante que solicitó anonimato.
Los sudamericanos vieron como una señal de que las negociaciones no avanzarían el hecho de que el comisario europeo para la agricultura, Phil Hogan, haya participado sólo del inicio de la reunión, abandonándola luego de dos intervenciones alegando otros compromisos.
El acuerdo comercial entre ambos bloques viene siendo negociado desde hace casi 20 años. El Gobierno brasileño tenía esperanzas de que al menos un preacuerdo sería firmado en este encuentro, con los principales puntos ya cerrados y solo dejando pendientes los detalles técnicos.
Esta puede haber sido la última chance de cerrar trato durante el gobierno de Michel Temer. Los brasileños temen que, con el inicio de la campaña electoral en su país, nuevas negociaciones no sean posibles en el corto plazo, y la conclusión del tan esperado acuerdo quedaría para el próximo presidente.