“Rusia hizo un registro temporal de la vacuna a nivel del Ministerio de Salud de ese país. Es una de las muchas vacunas que se están impulsando actualmente contra el COVID-19 ya que hay más de 170 laboratorios que están en investigación sobre lo mismo, unas más avanzadas que otras”, manifestó el infectólogo.
Según Balmelli existen otras vacunas que están en etapas avanzadas de investigación como las de las farmacéutica Pfizer, Moderna y AstraZeneca, entre otras. Agregó además que la vacuna Sputnik V de Rusia realizó las primeras fases de prueba con humanos, tras las cuales pequeños grupos recibieron la inmunidad ante la enfermedad, por lo que ahora queda aplicarla en grupos más grandes.
“Ojalá sea efectiva, pero creo que es prematuro hablar de efectividad de la vacuna porque todavía falta que pase las diferentes fases de los ensayos clínicos para saber si su respuesta es altamente inmunogénica y perdurable en el tiempo. Es gratificante que la ciencia esté abocada en conseguir una vacuna para todo el mundo, de momento nos queda estar expectantes a los resultados de las pruebas a gran escala”, declaró el doctor.
Por otra parte, Balmelli señaló que si la vacuna no llena las expectativas de inmunogenicidad puede ser peligroso en el aspecto de que las demás también podrían perder su fiabilidad a nivel internacional, lo que a la vez representaría un valor negativo a futuro.
Así también, expuso que el que exista una competencia entre las farmacéuticas es algo positivo, y que actualmente casi todas se encuentran con sus estudios en fase 3 (pruebas a grupos amplios). Si se dan las condiciones, a inicios de 2021 se empezarán a producir las vacunas a gran escala y probablemente estas lleguen a nuestro país en la temporada invernal del próximo año.
Relaciones diplomáticas
La ex-presidenta de la Cámara de Comercio Paraguayo - Rusa, Lic. Rebeca Gaona manifestó que las autoridades rusas esperan comenzar la inmunización de los grupos de riesgo desde septiembre, y comenzar la vacunación para la ciudadanía en general desde el 1 de enero.
“Estamos intercambiando ideas con empresarios de las farmacéuticas rusas. Estudiando las posibilidades de que una compañía del rubro farmacéutico, si está interesada en importar estos avances, pueda realizar el registro correspondiente y encargarse de todos los procesos adicionales como la distribución y comercialización”, mencionó Gaona.
Por último, confirmó que en el caso de que la vacuna rusa pueda producirse en una compañía de Brasil su llegada a Paraguay será más rápida y es probable que nuestro país sea un aliado estratégico por los altos estándares de su industria farmacéutica.