De acuerdo con los datos del Banco Central del Paraguay (BCP), la cartera de créditos del sistema bancario alcanzó G. 179,4 billones, mientras que los depósitos totalizaron G. 174,2 billones, lo que representa un crecimiento del 7,28%. Los CDA, con una participación del 45%, se mantienen como el instrumento de ahorro preferido por los clientes, seguidos por los depósitos a la vista (31%) y las cuentas corrientes (23%).
Cramer afirmó que la presencia del sistema ha mostrado solidez, respondiendo a las necesidades de crecimiento económico. “El sistema ha tenido los músculos suficientes para seguir estando presente en el mercado, acompañando el crecimiento que está teniendo el país en todos los sectores”, afirmó.
Al cierre del tercer trimestre, los bancos reportaron ganancias por valor de G. 4,1 billones, creciendo 8% respecto al mismo periodo del año pasado. Explicado por el aumento de 5,5% del margen operativo que ascendió a G. 11,2 billones. Al respecto Cramer consideró que los factores que incidieron en este crecimiento son la competitividad y la eficiencia del sistema.
“Esta utilidad es fruto del esfuerzo que se está haciendo, no solo para financiar grandes proyectos que hoy están en el país, sino también en incluir a cada vez más paraguayos dentro del sistema. El sector se ha centrado también en hacer que el crecimiento sea inclusivo, no solo con grandes proyectos”, dijo Cramer.
En esa línea, añadió que las utilidades del sistema también permiten que el mercado sea más competitivo, y así poder financiar más proyectos y más desarrollo.
¿Qué marcó la agenda financiera?
Para Cramer, uno de los hitos más claros del 2025 fue el salto cualitativo hacia la madurez digital del usuario financiero. Los clientes adoptaron con naturalidad los servicios digitales, lo que permitió una operación más eficiente y accesible en todo el sistema.
“Observamos un crecimiento significativo en el ecosistema de pagos, impulsado por el incremento de transferencias y por la consolidación del uso de alias como herramienta fundamental en las transacciones”, señaló.
El año estuvo marcado también por una notable expansión crediticia. El volumen de préstamos creció a un ritmo acelerado que, en algún momento, surgieron dudas sobre la capacidad del sistema para sostener la liquidez. Sin embargo, Cramer asegura que el sector respondió con firmeza:
“El sistema mostró tener músculos. No se vio amenazado por falta de liquidez, sí con algunas tensiones, pero nunca con riesgo. Y hoy esas tensiones van desapareciendo.”
La ejecutiva dijo que este comportamiento refleja la confianza de los ahorristas paraguayos, quienes acompañaron la expansión del crédito con un aumento en los depósitos.
A si vez el 2025 estuvo marcado por movimientos abruptos del tipo de cambio, un elemento siempre sensible para la economía paraguaya debido a la alta proporción de créditos y depósitos en moneda extranjera.
Para Cramer, este fue otro de los grandes desafíos del año: “El dólar tuvo un incremento fuerte al inicio del año y luego un descenso igual de pronunciado. Aún así, el sistema no se sacudió. Supo acomodarse a los choques y manejar los riesgos con profesionalismo.”
En ese sentido, subrayó que la industria logró navegar estas variaciones sin comprometer su estabilidad, demostrando capacidad técnica y prudencia en la gestión.
Cierre del año
A poco más de un mes para cerrar el año, Cramer adelantó que esperan cifras positivas, con un crecimiento sostenido en la cartera de créditos, impulsado por una mayor demanda de fondeo por parte de la economía.
“El desafío es que siga sosteniéndose y, en este punto, es bueno mencionar que hoy los paraguayos están confiando en el sistema, en su moneda, y está creciendo la cantidad de depósitos”, remarcó.