La aeronave sufrió serios daños en la parte frontal como el radomo o cúpula que protege al radar y los cristales del cockpit cuyas primeras capas fueron quebradas. También varias partes de ambas alas y el fuselaje sufrieron abolladuras debido al impacto de los granizos. Por ese motivo la aeronave estuvo parada un buen tiempo en el aeropuerto Silvio Pettirossi hasta que técnicos de la aerolínea realizaron algunas reparaciones rápidas y cambio de motores, para poder llevarlo así en vuelo ferry al centro de mantenimiento que tiene la firma Latam en la ciudad de São Carlos.
Recientemente, uno de los técnicos involucrados en la reparación publicó todo el trabajo que se le debió de realizar a la aeronave para restaurarla completamente. Por las fotos se puede observar que tuvieron que reconstruir casi por completo la parte frontal, cuyos componentes electrónicos, como el panel del cockpit, se retiraron quedando solo el esqueleto de la estructura para ser sustituidos los paneles que sufrieron daños.