Se define a los marketplaces como plataformas de venta online que nuclean diferentes vendedores en un mismo portal. Son ejemplos Mercado Libre, Amazon, etc. En tanto que las redes sociales son espacios web donde la gente se relaciona e intercambia información sobre diversos temas. Ejemplos: Facebook, Instagram, etc., las que en la actualidad cuentan con integraciones específicas para negocios o particulares donde pueden ofrecer directamente sus productos.
Lo bueno y lo no tanto
Ambas alternativas ofrecen tanto beneficios como desventajas para vender. Los marketplaces sacan ventaja en el aspecto de que facilitan a los compradores la búsqueda y comparación de precios, el producto en cuestión es accesible para un público numeroso, y además las plataformas ponen a disposición su sitio, por lo que hay un ahorro en algunas gestiones administrativas y de seguridad.
Entre las desventajas se pueden citar el hecho de que cobran comisiones por venta, por posicionamiento y por la realización de gestiones; disponen de un marco de gran competencia que es fácilmente accesible para los usuarios, por lo que el producto que uno ofrece compite con muchos otros; y la imagen depende de un tercero por lo que no se tiene un control sobre ella.
Por su parte las redes sociales no requieren de costos iniciales, ya que montar una página en ellas es gratis, al menos inicialmente; ofrecen facilidad a la hora de crear rápidamente un espacio para el negocio; y mucha interacción con los interesados, por lo que son perfectas para promocionar productos.
Los aspectos más desfavorables para vender a través de las redes sociales son que el público de determinadas redes puede no encajar con nuestro negocio; es necesario pagar para evitar algoritmos que no muestran nuestro contenido; y la imagen también depende de un tercero, es decir, si la red cierra, el negocio también.
Evolución
La cuestión es por qué las redes sociales optaron por tener sus propios marketplaces y cuál es el futuro. “Esta tendencia surgió como una iniciativa para convertirse en jugadores importantes del comercio electrónico; y capitalizaron hábitos que ya existían de manera social, como por ejemplo, comprar y vender en su comunidades de Facebook a través de Marketplace”, señaló Agustina García Estrada, directora digital de Teo.
Entonces, ¿cuál elegir a la hora de tener que optar por una u otra alternativa? “No es una u otra sino cómo cada una se puede complementar con la otra; hoy la fusión de ambas es un hecho. Las más importantes, tanto Facebook como Google, tienen sus propios marketplaces, para competirle directamente a los grandes players del mercado”, remarcó García Estrada.
Entonces, antes de ir por una u otra alternativa, la clave está en combinarlas. Las redes sociales, si se segmenta bien el público, son útiles para dar a conocer tu producto, y para ganar visibilidad y tiempo, el marketplace es una opción necesaria.
En el mercado existen varias propuestas y en Teo desarrollan soluciones digitales para que puedas desarrollar tu negocio y llegues a tu público objetivo.