En 2020, poco después del fracaso de las negociaciones Boeing-Embraer, comentábamos que el primer ministro indio Narendra Modi había presentado en 2016 un megaproyecto de conectividad regional llamado UDAN: más de 100 aeropuertos (y cientos de rutas nuevas) con tarifas fuertemente subsidiadas serán construidos y concesionados. Para ese fin, hace falta un avión regional autóctono de unas 80-90 plazas.
Dicho proyecto industrial no tuvo grandes avances y la asociación con la brasileña impulsaría enormemente el proyecto, ya que Embraer es especialista en el segmento. En aquel momento R.K. Tyagi, ex presidente de Hindustan Aeronautics, le había escrito al gobierno indio pidiéndole que aproveche la oportunidad.
A fines de 2021, el proyecto UDAN tenía 128 rutas de aproximadamente 500 kilómetros de extensión promedio sirviendo 45 aeropuertos, adjudicadas y proyectadas para iniciarse en 2022.
Actualmente un 2% de la población india puede costear un viaje en avión, y la intención del proyecto es incrementar ese porcentaje con la venta de la mitad de la capacidad de un avión a un costo fijo de ? 2.500 (rupias), equivalentes a US$ 32, y la mitad restante a valores de mercado.
Más allá del interés indio, Meijer le confirmó a Reuters -en el marco del Airline Economics Conference- que la compañía mantiene “charlas detalladas” con fabricantes de motores para afinar parámetros sobre los motores que impulsarían dicho turboprop regional. La idea de Embraer es competir directamente contra el líder absoluto del mercado, ATR.