“Sobre Credicentro podemos señalar que es una entidad financiera no bancaria, la cual nace como una pequeña casa de créditos que operaba en el Mercado 4 en 1984, en aquel entonces su principal enfoque eran las operaciones mínimas de personas y asociaciones, lo que le fue abriendo camino hacia el gran futuro que le depararía como empresa financiera. Aquello que parecía un sueño año tras año fue tomando fuerza y forma, convirtiéndose en la entidad que son hoy, comprometida con las metas de miles de personas, tanto de nuestros más de 45.000 clientes, así como también de nuestros 250 colaboradores”, expresaron desde la firma financiera.
¿Qué pueden referirnos acerca del brief?
Credicentro llegó a Ayo como una marca consolidada y con una estructura de comunicación sólida, algo que se fue construyendo en los últimos años mediante la fusión de las visiones de sus directivos Víctor Hugo Vásquez (P) y Miguel Vásquez (H). Que la marca tenga una experiencia previa en cuanto a construcción de marcas nos ayudó bastante, ya que el cliente nos aportó un buen brief, con objetivos y necesidades reales de la marca.
Venían trabajando anteriormente con la campaña “Empezá hoy”, un concepto que consideraban que no se terminó de instalar y por ende resultó irrelevante para sus clientes.
¿Qué necesitaba la marca?
Necesitaba generar una cercanía con las personas y sabían que eso se debía lograr con una campaña que perdure y con la que puedan seguir construyendo a futuro.
El cliente de Credicentro necesitaba saber “lo que la marca hacía por ellas” y cuál era el diferencial que les hacía una entidad distinta a las demás, en un sector bastante competitivo y en el que la gente normalmente tiende a desconfiar.
¿Qué hicimos desde la agencia? Desde Ayo supimos interpretar la necesidad del cliente, entonces para cubrir la misma lo que hicimos fue empezar a construir desde el propósito de la marca, algo que ciertamente ya estaba instalado, pero no estaba siendo comunicado.
Otra de las cosas que nos aclaró el panorama es que Credicentro buscaba ser una marca que perdure en el tiempo, algo que supo hacer y que lo confirman sus 34 años de trayectoria.
Nosotros desde la agencia consideramos que las marcas que perduran, son aquellas que aportan algo a la vida de las personas, entonces comenzamos a pensar desde ahí, desde el “qué aporta Credicentro a la vida de las personas” para así poder crear la campaña que la marca estaba necesitando.
Sabíamos que el hecho de que Credicentro sea una entidad financiera, era algo muy positivo, ya que le aportaba soluciones a la vida de las personas, de forma ágil y segura.
Entendiendo esto es que pensamos que esta nueva campaña de la marca, debía estar planteada desde aquello que las personas constantemente buscan, mejorar sus vidas, alcanzar sus sueños, algo que podría ser posible gracias a Credicentro. Lo podían decir ellos que son un claro ejemplo de que con esfuerzo y convicción todo es posible.
Teniendo ese “qué” tan fuerte, es que todo se fue dando como un efecto dominó, ya que el concepto partía desde la historia misma de la marca, a nosotros solo nos restaba contar más historias igual de inspiradoras para que la gente entienda que si lo podían soñar, lo podrían lograr.
Y fue lo que hicimos, una extensa investigación acerca de los posibles protagonistas de la campaña, en Paraguay hay miles de historias de éxito, es por eso que decidimos que las historias que íbamos a mostrar debían ser aquellas que se reflejan en la historia de la marca, una llena de resiliencia y persistencia.
Acerca de los protagonistas de la campaña:
La Orquesta de Instrumentos Reciclados de Cateura, una historia que nos habla de transformación e innovación, quienes son nuestra bandera en cada país que visitan, haciendo algo que muchos consideran increíble como lo es hacer música con objetos que muchos consideraban basura.
Tatiana Benítez, quien fuese nuestra representante en el Juegos Mundiales de Deportistas Trasplantados, a su corta edad fue Medalla de Oro en la mencionada competencia de la cual participó con un corazón trasplantado, una historia que se cuenta desde una pasión y un sueño
Beto Ramírez, un claro ejemplo de tenacidad y resiliencia, un deportista que demostró que nada es imposible, quien tras sufrir un accidente que lo dejó parapléjico e imposibilitado de manejar, supo reinventarse y no dejar que nada trunque su sueño, y fue así que en octubre de 2018 Beto logró completar la difícil travesía de completar todo el circuito del Rally del Chaco, una de las competencias más difíciles del mundo automovilístico.
Lali González, quien cuenta cómo su carrera como actriz toma gran impulso tras haber realizado una película en el Mercado 4, un lugar que parecía común y hasta hostil para cualquier ciudadano fue un detonador para el éxito del cine paraguayo. Una actriz que demuestra perseverancia para alcanzar sus sueños y versatilidad para desenvolverse en cada papel que le toca representar, siendo hoy la primera paraguaya en la plataforma Netflix por su participación en la una película internacional.
La Campaña
La campaña consta de cinco materiales audiovisuales, uno principal que presenta el concepto y cuatro micro documentales que cuentan las historias de quienes protagonizan la campaña, material que estuvo a cargo del equipo de The Lab bajo la dirección de Mauri Rial.
“Desde Ayo nos sentimos sumamente honrados por haber sido parte de la evolución de esta marca, nos llena de orgullo que nuestras ideas hayan sido un paso más, hacia el futuro prometedor de una marca que merece el cariño y la credibilidad de todos los paraguayos”, expresaron los creativos.