“Espacio Verde es una empresa de paisajismo, que hace 15 años está abocada exclusivamente a la creación de proyectos en espacios externos y a la ejecución de los mismos. Nuestro objetivo es encausar la naturaleza, para acercarla al medio urbano. El ser humano en el proceso de construir, destruye el entorno y nuestra labor es recomponerlo uniendo la naturaleza a la obra arquitectónica”, indica la propietaria.
¿EXISTEN LAS PLANTAS DE INTERIOR Y DE EXTERIOR?
“Con relación a las plantas de interior, es bueno saber que si bien algunas resisten varios días en espacios internos, incluso con poca luz y acondicionadores de aire, este no es su estado natural. No existe planta de interior así como lo entendemos nosotros. Las plantas de invernadero tienen otro manejo. Por lo tanto, si queremos que las plantas nos regalen su belleza en nuestros hogares u oficinas, deberíamos tener dos plantas para cada lugar e ir rotándolas. De esta manera, mientras una está dentro, la otra se recupera afuera”, comenta la experta.
“Irremediablemente debemos rotar cada 15 días aproximadamente las plantas que introducimos al interior antes que se empiecen a deteriorar, porque sino el tiempo de recuperación en exterior se prolonga por varios meses. Es bueno que cuando saquemos las plantas afuera reciban el agua de lluvia de ser posible. Nunca exponerlas a los rayos directos del sol, este es un error frecuente por el que suelen morir plantas que estuvieron en el interior”, indica Marta.
RECOMENDACIONES GENERALES
“Siempre recomiendo aprovechar las ventajas de vivir en una región subtropical, donde los días fríos se reducen a unos pocos y podemos disfrutar de especies perennes, que nos pueden acompañar con flores todo el año”, dice Strubing.
“Esta época es buena para la poda y la limpieza. Deberíamos airear las plantas retirando las ramas y las hojas secas o enfermas. También es recomendable limpiar y airear el suelo y tener mucho cuidado con el riego porque el agua no se evapora tanto como en verano y el exceso de agua perjudica más que la falta, principalmente en esta época, pudriendo la raíz y propiciando la aparición de hongos (muy común en otoño e invierno). Si esto ocurre, se debe pulverizar la planta enferma y las que están alrededor con un buen fungicida. Es recomendable para esto llevar una parte de la planta afectada (hoja, pedazo de rama) a una tienda especializada para comprar el producto correcto”, recomienda Marta.
“En otoño e invierno no se recomienda el abonado, porque la planta lo aprovecha muy poco debido a que el metabolismo está muy lento. En esta época debemos solo observar las plantas y permitir que la tierra llegue a secarse entre riego y riego. Pero sobre todo, independiente de la época el año, debemos observar a las plantas, porque ellas siempre nos hacen saber a su manera si están a gusto o no. Con solo un poco de atención, podremos disfrutar de un jardín que renueve la energía de nuestros días”, finaliza la propietaria de Espacio Verde.