Para nuestra mala fortuna, el informe Basilea de Gobernanza 2019 colocó en estos días a Paraguay cuatro posiciones más arriba dentro del ranking de riesgo, específicamente en el puesto 14 luego de haber estado en el 18. El especialista en prevención de lavado de la consultora Ferrere, Federico Silva, explicó que ante este registro del Instituto Basilea, Paraguay incrementa más las posibilidades de ser catalogado como potencial foco de lavado de dinero, algo que repercutirá en el desarrollo de negocios del país.
“Los corresponsales de empresas extranjeras incrementarán exigencias a los bancos locales para hacer transferencias, requerirán mayores regulaciones, más información y transparencia”, expresó Silva, quien además añadió que casos como la detención de Darío Messer -implicado en hechos de lavado-, no necesariamente ayudan al país a tener una buena calificación porque Gafilat no solamente tiene en cuenta esos aspectos, sino que analiza la fortaleza estructural que tiene Paraguay.
Silva agregó que los indicadores que más peso tendrían dentro del examen de Gafilat serán: la manera en que reacciona la Secretaría de Prevención de Lavado de Dinero (Seprelad) y el paquete de leyes evaluado por esa misma institución. El proyecto de ley actualmente está pendiente de aprobación en el Congreso y ayudaría a mejorar la percepción de organismos extranjeros.
A grandes rasgos, el paquete de leyes -que por el momento permanece en estudio dentro de una comisión del Congreso- incluye tipos penales como el soborno en el ámbito privado o el soborno transnacional, la creación de tribunales especiales de crimen organizado y lavado de activos y la actualización de las normativas que tratan el comiso.
En cuanto a la nueva posición de Paraguay en el informe de Basilea, el especialista indicó que la ubicación del país refleja la percepción que se tiene de Paraguay a nivel internacional y que, a su vez, se sostiene en casos mediáticos como la impune circulación dinero de forma irregular, observada en este último fin de semana. “Tal como estamos hoy, no vamos a superar la prueba de Gafilat, hay que aprobar el paquete de leyes y esperar que en un plazo razonable se compruebe que estas normas funcionan. Estamos a contrarreloj y no encontramos efectividad en el Congreso”, apuntó.
Dificultades para la economía
Sobre el impacto que tendrá en la economía fracasar en el examen de Gafi, Silva dijo que Paraguay tiene la oportunidad de lograr el grado de inversión para conseguir mayor capital extranjero, pero con los problemas actuales como la inestabilidad política y la percepción de corrupción, las posibilidades de llegar al grado de inversión disminuyen.