¿En qué consiste el moonshot mindset?
Es un tipo de pensamiento exponencial, no lineal, que permite abordar problemas que no se han resuelto en mucho tiempo de una manera no necesariamente intuitiva, para llegar a soluciones que no hemos visto en décadas. Cuando decides enfocar una solución en un gran problema que parece impenetrable, pero tienes evidencia científica de que no es imposible de resolver mediante la tecnología y la ciencia, estás creando un moonshot.
En emprendimiento, nos referimos a los moonshots cuando hablamos de ideas masivas, difíciles de explicar, cuantificar y planificar. Son ideas tan ambiciosas que resultan complejas en todos los sentidos, pero no imposibles.
Es un mindset, no un concepto, porque siempre estás pensando en cómo debería ser, por qué algo no funciona y cómo podría operar mejor. Implica asumir que la mejor manera de hacer algo no es necesariamente la que usamos actualmente. Así, te mantienes en constante aprendizaje.
Es dar un paso atrás, cuestionar lo que creías saber, abrirte a formas distintas de hacer las cosas (incluso fuera de tus habilidades), intentar mucho, fallar mucho y formular más preguntas. Para abordar un moonshot, hay que pensar de manera radicalmente diferente y empezar de cero.
¿Se puede aplicar en el mundo de los negocios?
Creo que sí. Es el mindset que opera en Silicon Valley. Las tecnológicas han demostrado que esa capacidad de resiliencia, flexibilidad, rapidez de ideas y agilidad para adoptar lo nuevo es lo que realmente te permite avanzar, especialmente en mercados ultra competitivos y agresivos.
¿Debe haber un cambio en la mentalidad de quienes hacen negocios en países como el nuestro?
Más que un cambio, diría que hay que abrazar el cambio de manera menos estructurada. En lugar de tener todas las respuestas o todos los planes, se trata de probar, inventar un poco, ver qué pasa, aprender de eso y hacer algo diferente una y otra vez. Es una evolución más acelerada y flexible de cómo funcionan los negocios hoy en día.
¿El moonshot mindset está ligado a la tecnología?
Creo que es al revés. La tecnología surge de un pensamiento así, porque es una mentalidad en constante evolución que requiere cambios constantes. Y de ahí sale la tecnología: de no conformarse con la infraestructura que tienes hoy y de querer la nueva ahora, no mañana.
¿El mundo de los negocios actual necesita usar mucho más la tecnología?
Cien por ciento, porque permite tomar mejores decisiones, escalar lo que ya funciona y probar si algo tiene sentido para el modelo de negocio. No hay modelos de negocio incorrectos; simplemente hay que observar mejor y refinar. La tecnología permite disponer de más datos, analizarlos mejor, ver no solo lo que piensas que tienes, sino lo que realmente hay y lo que ha sucedido. Así puedes avanzar más rápido y hacer ajustes en un día o dos. Una semana es un siglo en Silicon Valley. Con la tecnología, capturas los datos más rápido, los analizas más rápido y avanzas más rápido. Negocio y tecnología van de la mano.