En su exposición, López indicó que el proyecto de PGN ascendió a G. 85,5 billones (US$ 13.400 millones), 2% mayor al del 2019, de los cuales G. 45,9 billones serán ejecutados por la administración central y G. 39,6 billones por los entes descentralizados. El presupuesto para la educación sería de G. 5,6 billones, salud G. 5,8 billones e infraestructura sería de G. 5,2 billones.
En el caso de educación y salud, las respectivas carteras solicitaron la ampliación de US$ 500 millones y US$ 1.000 millones para cubrir sus obligaciones sobre infraestructura, salarios, medicamentos y unidades de atención familiar. Según López, el presupuesto posee excedentes por valor de US$ 250 millones por el crecimiento vegetativo causado por la ley de jubilación, la fuerza laboral del Estado y la seguridad.
Sobre los fondos para infraestructura, el ministro manifestó que el Gobierno tiene pensado continuar financiando obras a través de deuda contraída y de esa manera trabajar en la reducción de la brecha de infraestructura del país, valuada en US$ 25.000 millones de inversión. “Hoy no tenemos la capacidad de hacer ese tipo de inversiones y por eso la realizamos gradualmente. Desde el Gobierno vamos a revisar cuáles son los proyectos que convienen llevar adelante mediante Alianza Público-Privada”, sostuvo.
En cuanto a la Ley de Responsabilidad Fiscal, adelantó que desean cerrar con el 1,5% del PIB de déficit fiscal, sin embargo recalcó que el Estado tiene problemas por la caída de los ingresos, la cual llegó a US$ 200 millones aproximadamente. “Es importante entender lo que pasa con la Ley de Responsabilidad Fiscal porque es fundamental para las finanzas públicas. El ministerio de Hacienda no la va a violentar y si queremos superar el tope de 1,5%, lo haremos acordándolo con la sociedad a través de los representantes del Congreso”, manifestó.
Para graficar mejor los escenarios que podrían darse en el 2020 y el manejo de la responsabilidad fiscal, el ministro argumentó que si para fines de octubre de este año observan repuntes dentro de la economía no sería viable “apagar los motores”, limitando las operaciones del Ministerio de Obras Públicas y Comunicaciones (MOPC) ni del Ministerio de Urbanismo, Vivienda y Hábitat (MUVH) porque sería contraproducente dar señales negativas cuando hace tiempo que se espera una recuperación, solamente para poder cumplir con el tope establecido por la Ley de Responsabilidad Fiscal.
Cabe complementar que la Ley de Responsabilidad fiscal establece excepciones en momentos de crisis nacionales e internacionales, las cuales permiten que el Estado supere el tope de 1,5% de déficit fiscal con relación al PIB y flexibilizarlo hasta el 3%.