“Vamos ocupando espacios que antes eran netamente de los hombres. La participación de las mujeres en el sector ganadero ha crecido mucho en relación a años anteriores, es impresionante.”, expresó Claudia Bogado, ingeniera agrónoma y actual gerente de la Asociación de Criadores de Brangus del Paraguay (ACBP).
Resaltó que hay excelentes mujeres profesionales trabajando dentro del rubro ganadero, algunas en la parte técnica, otras en el campo y también empresarias. Trabajos que antes eran exclusivamente de los hombres, ellas hoy los ejecutan con muy buen desempeño.
“Sentimos que somos reconocidas, que nuestro trabajo está bien hecho, especialmente en el ámbito de los patrones, capaz al empleado de estancia o al capataz les cuesta un poco más, pero también ya se están acostumbrando de a poco a la presencia de la mujer en el campo”, contó Claudia.
Por su parte, Sara Bareiro, ingeniera agrónoma, la cual se desempeña como registradora de la razas bovinas Brangus, Braford, Brahman y Nelore y tiene a su cargo también el comisariato en las expos nacionales, que consiste en la organización de los animales para la admisión, el pesaje y juzgamiento de los mismos, manifestó: “estamos siendo más atrevidas y nos estamos involucrando más, no sé si será porque la sociedad está abriéndose un poco más a que las mujeres hagamos cosas en el campo, pero estamos teniendo muchas más oportunidades y cumpliendo papeles importantes dentro de las empresas ganaderas y relacionadas al rubro”.
Subrayó que depende de cada mujer demostrar lo que vale, “cuando lo hacés, automáticamente tu trabajo es reconocido. A veces ocurre que cuando llegás al campo te miran raro, pero cuando empezás a trabajar y se dan cuenta de que entendés lo que hacés, enseguida te respetan, incluso a veces dicen que valoran más el trabajo porque viene de una mujer y ellos admiran eso”, aseguró Bareiro.
Así mismo, Karen Soutter, empresaria ganadera quien maneja el negocio familiar junto a su esposo, mencionó que desde los inicios de la ganadería la mujer siempre estuvo presente, ocupándose de las diferentes facetas que involucran al trabajo ganadero. “Actualmente la mujer, aparte de acompañar al hombre también ocupa cargos directivos en empresas ganaderas y muchas veces participa de la toma de decisiones que hacen el desarrollo de la misma”.
“Antiguamente el hombre como cabeza de familia llevaba adelante el negocio ganadero, actualmente una buena capacitación ha puesto a la mujer en las mismas condiciones para estar también al frente del negocio”, indicó Soutter.
Al ser consultada sobre qué faltaría pulir o mejorar para que las mujeres puedan involucrarse de lleno y considerar la ganadería como medio de vida, Karen dijo que capacitarse en todo sentido es la clave para tratar de competir en igualdad de condiciones con los hombres. “Por ejemplo una forma de instruirse sería asistiendo a charlas, conferencias y seminarios relacionados al tema ganadero. También participando de las salidas de campo que se van realizando en los distintos puntos del país e interrelacionarse con personas dedicadas a este rubro”.
De igual manera, opinó Karina Ramírez, doctora en veterinaria dedicada también al rubro pecuario. “De una ganadería paraguaya, históricamente tradicional, donde no había muchas oportunidades para la mujer, pasamos a tener un enfoque cada vez más empresarial. Donde vemos manejos más intensivos de los recursos, aplicación de biotecnologías para el mejoramiento genético, reproductivo y nutricional, entre otros. Creando nichos laborales donde la mujer puede destacarse”.
Explicó que se dedica a la rama de biotecnología reproductiva, específicamente a la producción in vitro de embriones bovinos, en la cual muchas mujeres en Paraguay y a nivel mundial están sobresaliendo.
Por último, afirmó que siente que su trabajo y aporte es reconocido en el ámbito ganadero, “parte de ese reconocimiento considero se debe a la convicción, principalmente por parte nuestra, de las mujeres, de que tenemos un montón de fortalezas, que bien orientadas nos van a seguir dando muchas satisfacciones a futuro”.