El presidente del consorcio, Antonio Vasconsellos, adelantó que esta edición traerá importantes novedades. “Vamos a tener 60 ejemplares de Nelore y Nelore Mocho de bozal en un galpón nuevo de 444 m2, construido con el apoyo de la Nelore y Banco Sudameris”, destacó en entrevista con InfoNegocios. La exhibición de animales de bozal se sumará a tres remates programados durante la feria: el miércoles 12 de octubre, a partir de las 15:00, se realizará el remate de invernada; el jueves 13, al mediodía, se llevará a cabo un remate de vacas en ordeñe; y el viernes 14 será el turno de los reproductores Nelore, con alrededor de 70 toros y vaquillas en oferta.
La feria también ofrecerá un programa académico y de demostraciones prácticas. Entre las principales atracciones se encuentra la presentación de un huerto experimental de casi 600 metros cuadrados, a cargo de la empresa Oceanic SA, así como la implementación de un sistema silvopastoril con eucaliptos plantados hace dos años. En paralelo, se realizarán charlas sobre genética nacional de maíz, con la participación del especialista Porfirio Villalba, y jornadas técnicas dedicadas a la industria lechera, uno de los sectores económicos más relevantes del departamento de San Pedro.
Vasconsellos destacó que la industria láctea tendrá un espacio especial en la feria, con juzgamiento de 22 animales y remate posterior, además de conferencias enfocadas en mejorar la productividad y calidad de la leche. “Nuestra meta es incentivar la parte lechera, que es el segundo productor más importante del país, después de Campo 9. Para nosotros es un objetivo estratégico”, señaló.
El evento contará con mejoras sustanciales en infraestructura con respecto a la primera edición. Se adquirieron dos transformadores de 150 kVA para garantizar una distribución eléctrica eficiente, se instalarán 42 alumbrados públicos para extender las actividades hasta las 21:00, y se renovaron servicios básicos, como baños y volatería fija. Además, la superficie destinada a lotes agrícolas creció y los productores de maíz, soja y sorbo podrán exhibir avances en genética y rendimiento, fortaleciendo la integración de la agricultura y la ganadería.
La primera edición de la FASP, realizada en 2024, atrajo a más de 15.000 visitantes, con la participación de 130 empresas expositoras y una facturación de alrededor de US$ 20 millones. Este año, los organizadores esperan superar esas cifras, proyectando entre 20.000 y 30.000 asistentes y una recaudación que podría superar los montos alcanzados anteriormente, gracias a la mejora de los precios de los remates y al incremento en la cantidad de animales ofrecidos, que se estima llegará a 1.200 cabezas.
El evento cuenta con el respaldo de la Asociación Rural del Paraguay (ARP) y de la Asociación Paraguaya de Criadores de Nelore (APCN), que confirmaron su participación total. “Es un honor apoyar la feria. Todos los cabañeros han confirmado su asistencia y vamos a estar presentes al 100%”, afirmó Luis Soljancic, presidente de la APCN, resaltando la importancia de la feria como vitrina para la calidad genética y el potencial del hato nacional.
Con estas novedades, la Segunda Feria Agropecuaria San Pedro busca consolidarse como una plataforma estratégica para la ganadería y el agro en la región, fortaleciendo el intercambio comercial, promoviendo la innovación genética y potenciando la industria lechera. Para los organizadores, la feria ya no es solo un encuentro anual, sino un espacio de desarrollo sostenible y un motor económico que proyecta al norte del país como un polo de crecimiento en el sector agropecuario.