“Los avances más significativos que tuvo el sector en los últimos años tiene que ver con la mayor profundización del uso de la tecnología en la sociedad paraguaya, así como la diversificación que se refleja al abordar otros tipos de actividades y no solamente la elaboración de sistemas contables y administrativos”, añadió.
Ortíz destacó la creación de canales informáticos de comunicación con clientes que en la actualidad ya forman parte de las operaciones de comercios, como también la posibilidad de que hoy las empresas de software tienen para sacar productos a los mercados internacionales.
Sin embargo, el titular de la Cisoft agregó que aparte de tener buenas experiencias exportando software a Europa, EE.UU., Australia o a nivel regional, el mercado interno es el más importante para el desarrollo software y la generación de mayor valor agregado a estas ofertas.
“El sector privado tiene relevancia dentro de la actividad del rubro en materia de desarrollo y adaptaciones de software extranjeros”, apuntó Ortíz, quien también destacó el papel del sector público, aunque no iguala al primero.
En lo que respecta al trabajo conjunto que lleva el sector público y privado, Ortíz afirmó que lo más necesario es la construcción de mayor infraestructura, mejor cantidad de internet y aspectos básicos como la educación y la salud que son insumos importantes para formar una sociedad “del conocimiento”.
Asimismo, Ortíz celebró que el rubro esté creciendo de manera inesperada y que las gestiones dentro de los negocios nacionales estén adquiriendo cada vez más tecnología, a tal punto que las maquinarias para la producción directa ya estén compuestas en un porcentaje alto de innovaciones digitales.
Por otro lado, la integración regional es un hecho que debe acrecentarse en Latinoamérica, según Ortíz, articulando contactos entre grupos de empresarios y personas innovadoras.
El ejemplo uruguayo
Ortíz resaltó los avances que tuvieron Brasil y Argentina en lo que respecta a la industria del software, pero detalló que estos dos grandes países tienen las condiciones para convertirse en jugadores importantes a nivel local, por lo que puso de ejemplo el desarrollo de software que tuvo Chile y Uruguay, en especial el segundo que ya saca su producción masivamente y son pioneros exportando servicios de software.