Si te decidiste por una cocina ecléctica, considerá una fórmula que pueda conjugar en un solo espacio varios materiales y estilos, llegando a conseguir personalizar este ambiente, de manera tal, que se convierta en exclusivo y único para tu familia.
En una cocina de estilo ecléctico vale todo, pero más que el todo vale, lo importante es la creatividad de combinar cada objeto que se tiene con el mobiliario indicado, creando espacios armónicos.
Aunque en algunos casos se utiliza la misma gama de colores para decorar la cocina, con el fin de conservar un estilo único y hogareño, todos los colores se llevan bien con el estilo ecléctico, así que no te preocupes cuando elijas y combines las diferentes tonalidades.
Es totalmente válido tener muebles de estilo barroco y combinar con piezas y artilugios de tipo oriental. También se pueden concretar los espacios blancos con muebles a rayas o con flores de colores fuertes. Te invitamos a jugar con la integración de tonalidades, texturas, pesos y formas. Pero ojo, hay que tener cuidado porque al mismo tiempo se debe evitar ser confuso.
En cuanto a los complementos, distintos tipos de adornos y objetos pueden ser útiles para decorar las paredes, como por ejemplo: un plato de cerámica con paisajes naturales colgado en la pared al estilo cottage, unas cortinas de encaje al estilo inglés. Si querés darle un toque más rústico, algunos utensilios estilo antiguo o unos frascos reciclados son los elementos ideales.
En definitiva, la decoración ecléctica es perfecta para aquellas personas que no tienen un estilo preferido a la hora de decorar, sino que más bien se inclinan por utilizar elementos de diferentes estilos y épocas en un mismo ambiente.
Te invitamos a probar este estilo lleno de personalidad, que no deja indiferente a nadie.