La demencia afecta a más de 55 millones de personas en todo el mundo, siendo la más común la enfermedad de Alzheimer, que representa entre un 60% y un 70% de los casos, según la Organización Mundial de la Salud (OMS).
La Clínica Mayo describe la enfermedad de Alzheimer como "un trastorno del cerebro que empeora con el tiempo. Se caracteriza por cambios en el cerebro que resultan en depósitos de ciertas proteínas. La enfermedad de Alzheimer hace que el cerebro se encoja y que las neuronas cerebrales, a la larga, mueran".
Por el momento, no hay un tratamiento que cure la enfermedad progresiva e irreversible, pero sí existen medicamentos que mejoran los síntomas o retrasan su progresión. En este sentido, la Administración de Alimentos y Medicamentos de Estados Unidos (FDA, por sus siglas en inglés) aprobó por primera vez el uso de un fármaco que retrasa moderadamente el Alzheimer.
Se trata de Leqembi (lecanemab-irmb), un medicamento desarrollado por el laboratorio japonés Eisai y el estadounidense Biogen, que es capaz de reducir los cúmulos de amiloide en el cerebro, una característica distintiva de la enfermedad. Datos posteriores demostraron que el fármaco es capaz de ralentizar el deterioro cognitivo y funcional en un 27% en 18 meses, según informó la agencia Telam.
"La acción de hoy es la primera verificación de que un medicamento dirigido al proceso patológico subyacente de la enfermedad de Alzheimer ha demostrado un beneficio clínico en esta enfermedad devastadora", expresó Teresa Buracchio, directora interina de la Oficina de Neurociencia del Centro de Evaluación e Investigación de Medicamentos de la FDA. "Este estudio de confirmación verificó que es un tratamiento seguro y eficaz para pacientes que padecen la enfermedad de Alzheimer".
Según la FDA, la administración de Leqembi está recomendada para pacientes con deterioro cognitivo leve o en la etapa de demencia leve de la enfermedad de Alzheimer. Por otra parte, el medicamento puede presentar reacciones adversas tales como inflamación y hemorragia cerebral.