Fue así que en 1991, en la cocina de su casa en Valdivia, su ciudad natal en la Patagonia Chilena, nace “Kunstmann Lager”, una cerveza elaborada siguiendo estrictamente el edicto de la pureza Alemán de 1516, que establecía que las cervezas genuinas y de calidad debían elaborarse únicamente en base de 4 ingredientes naturales: agua, cebada malteada, lúpulos y levaduras.
Corría el año 1995, e instalado en el garaje de su casa, Armin Kunstmann complementa la propuesta con una cerveza negra “Kunstmann Bock”, para luego en 1996, desarrollar su mayor creación, “Kunstmann Torobayo”, una cerveza Pale Ale de color ámbar que se convirtió rápidamente, en una las cervezas preferidas por el consumidor del mercado local.
Ya por el año 1997, se inaugura la Cervecería Kunstmann en Valdivia, la marca ya contaba con su casa, que en poco tiempo logró ser un paso obligado para locales y turistas de la Patagonia. En 2002, la marca desarrolla una alianza de venta y distribución con el grupo CCU que le permitió lograr un alcance nacional y de a poco expandir sus horizontes hacia nuevos destinos en América del Sur.
En el año 2014 y con el objetivo de consolidarse como un referente de las cervezas artesanales de Latinoamérica, Kunstmann decide poner un pie firme al otro lado de la cordillera, abriendo las puertas de una nueva micro-cervecería en Bariloche. Desde donde hace más de 2 temporadas, deleita a los visitantes con más de 6 especialidades de cervezas y una propuesta gastronómica que rescata platos tradicionales alemanes junto a las delicias típicas de la Patagonia.
Continuando su programa de expansión regional y liderazgo en el segmento Craft/Artesanal, Kunstmann arribó a Paraguay en 2014 con una propuesta de 3 especialidades: Torobayo (Pale Ale) Gran Torobayo (Strong Pale Ale) y Lager sin filtrar, siendo las dos últimas, los nuevos lanzamientos de la especialidades de la marca en el país.