¿Cómo te iniciaste en el mundo empresarial?
Ingresé a la actividad empresarial hace 21 años. Estuve 17 años en el rubro automotor y de maquinarias agrícolas, gerenciando diversas marcas. Incursioné en el rubro inmobiliario hace cuatro años, en Habitalis, una desarrolladora inmobiliaria que se dedica a la construcción y desarrollo de viviendas en altura.
¿Cuáles son tus mayores logros en este campo?
Mi mayor logro es hacer que la gente tenga una experiencia positiva de vivir en un departamento. Hoy vemos que hay una importante migración de familias que van de vivir en una casa a hacerlo en un departamento.
Apunto a que nuestra ciudad crezca conforme a la morfología de los barrios, hacer edificios que no sean invasivos al barrio o a los espacios. Creo que lo estamos consiguiendo. En Habitalis tenemos siete edificios, cuatro terminados, dos en desarrollo y uno que se está iniciando. Y es un desafío porque en cada barrio al que vamos tenemos que ser muy respetuosos de esa morfología.
¿Qué obstáculos encontraste para desarrollarte como empresaria?
En lo que respecta al rubro de real estate nos falta mucho como ciudad, porque si bien los desarrolladores inmobiliarios podremos hacer grandes inversiones en la construcción de un edificio, nos damos cuenta de que no tenemos los servicios básicos, desagües cloacales, pluviales. Nos falta mucho para tener una ciudad que nos represente como empresarios.
¿Qué bondades y defectos tiene el empresario paraguayo?
Nos cuesta mucho todavía ser, no digo profesionales, sino que todavía no seguimos esos procesos a gran escala como lo hacen en otros países. Creo que tenemos mucho aún que copiar. Creo que en procesos debemos actualizarnos bastante. En cuanto a las bondades, opino que el empresariado paraguayo es muy honesto y confiable.
¿Qué consejo te hubiera gustado recibir cuando te estabas iniciando y se lo darías a otro empresario ahora?
Me hubiera gustado contar con todas las herramientas con que hoy se cuenta para tener las informaciones al momento. Hoy tenemos información de cualquier parte del mundo al instante. Pero nos falta leer, investigar. Hoy tenemos muchísima tecnología y las informaciones están ante nuestras puertas. Eso puede ayudar a las nuevas generaciones.
El empresario actual ¿debe tener alguna formación profesional relacionada con el mundo de los negocios?
Aparte de la educación teórica mis maestros siempre fueron los libros. Como dije, nos falta leer, investigar.
¿Es el Estado un aliado o un problema para el empresario? ¿Qué le reclamarías?
Necesitamos incentivos desde la municipalidad de Asunción para que nos sintamos con ganas y energía para construir. Pero pasa totalmente a la inversa. Cada vez son más los obstáculos que vamos encontrando. Necesitamos que se nos faciliten los procesos de catastro y registro público. Para poder vender un departamento o transferir la titularidad de un departamento los procesos son muy lentos y burocráticos. Eso nos lleva mucho más tiempo y costos, porque tenemos que tener una persona exclusivamente para que nos gestione, e incluso contratamos empresas de abogados. El Estado debe ser realmente un aliado estratégico del empresariado. Creo que cuando eso se conjugue va a ser favorable para todos.
Otro tema fundamental es el crédito hipotecario a favor del nuevo comparador. Existen 14.000 familias que hoy necesitan una vivienda propia donde pueden pagar un alquiler de G. 3,5 millones pero no pueden sacar un crédito porque existe mucha burocracia en la emisión de créditos hipotecarios. El BNF debe fomentar, apoyar mecanismos de financiamiento, que una familia que tiene un salario donde los dos ganan G. 10 millones pueda acceder a un crédito hipotecario a 27, 30, 35 años, con tasas razonables. En otros países existen los fondos hipotecarios y es lo que necesitamos. Si eso llega a suceder, aparte de mejorar la calidad de vida de muchas personas, también nos va a ayudar a crecer como empresarios porque las construcciones de edificios de departamentos van a ser exponenciales.
Un libro que todo CEO/gerente general debería leer al menos una vez en su vida.
Un libro que recomiendo es la autobiografía de Nelson Mandela, El largo camino hacia la libertad. Recomiendo no solo a cualquier CEO sino a cualquier ser humano. Es digno de admirar todos los obstáculos que tuvo que sortear para ser lo que fue.
¿Cuál es tu recomendación para mantener a tu equipo motivado?
Mi recomendación es el protagonismo, hacerle sentir partícipe a cada integrante de todo lo que se está haciendo. El equipo es el que está en el día a día, con el cliente, con los problemas, con todo lo que surge y son los que traen nuevas ideas. Necesitan ser escuchados. Existe el salario emocional, el trato, el sentido de pertenencia, la libertad de trabajar. No es el horario que cumplís, sino trabajar en base a un objetivo.
¿Cómo lidiás con el estrés que puede generar la actividad empresarial?
Tengo una práctica de técnicas de respiración y meditación que me ayuda muchísimo a manejar el estrés. Estas mismas técnicas las transfiero a mi equipo y las practicamos para canalizar y manejar el estrés. Seamos duros con los problemas pero sensibles con las personas. El estrés laboral existe porque personalizamos el problema. Debemos ser condescendientes con los demás y manejar también el estrés del equipo.