Según la resolución N° 13/2021, y como medida excepcional y transitoria, se reglamentó la exoneración de la sanción de inhabilitación para operar en cuenta corriente a las empresas de diversos rubros.
La emisión de cheque sirve a las personas físicas y jurídicas que utilizan financiación espontánea, debido a que son órdenes de pago sujetas a restricciones por insuficiencia de fondos o por una cuenta cancelada, que pueden dejar inhabilitadas las cuentas entre uno a tres años.
Para ejemplificar, Díaz indicó que un vendedor de hamburguesas libra un cheque a su proveedor de pan, otro al de gas y otro al de la carne. De esa forma se financia espontáneamente, es decir, sin pasar por toda la rigurosidad impuesta por el BCP y la Seprelad para el acceso al crédito.
“Con esta medida transitoria lo que se busca es que los emprendedores no sufran la cancelación de sus cuentas corrientes y, en consecuencia, no sean sancionados por el BCP hasta el 31 de diciembre”, argumentó Díaz.
Asimismo, detalló que la financiación espontánea es un activo para el emprendedor, como un auto o un inmueble, y como el BCP tiene un límite de endeudamiento, ese activo no podrá utilizarse cuando la matriz bancaria considere que la empresa endeudada dispone de un alto riesgo.
Por otro lado, el abogado aclaró que la herramienta más rápida para financiarse es el cheque y con la nueva medida de la Superintendencia de Bancos lo que ocurre es que se flexibiliza el uso de ese medio de pago.
“La empresa que tiene alto nivel de endeudamiento comúnmente opera con cheques y muchas veces por deber G. 11.000 te cierran la cuenta. Cuando ocurre esto la mipyme tiene que depositar ese monto, pagar multa e igualmente reciben sanciones”, puntualizó el abogado.
En complemento, afirmó que los bancos tienen la posibilidad de informar en tiempo y forma que se cubrieron los cheques emitidos, así como cuando intervienen cuando detectan insuficiencia de fondos o alguna cuenta cancelada indexada a los cheques emitidos.
Un dato no menor es que al mes de agosto, el causal de rechazo de cheques por variación fue el de los firmantes inhabilitados a operar en cuenta corriente, con un nivel de 4,4% superior al 2020.