En el caso específico de la caja fiscal, desde el Ministerio de Hacienda consideraron viable la unificación de las pequeñas cajas que la conforman y establecer un régimen mixto. “El problema con la caja fiscal es complejo porque a diferencia de IPS no administra un programa jubilatorio, sino ocho distintos. Muchos de estos ya son deficitarios y se pagan con superávit de otras cajas”, expresó Pedro Halley, gerente de prestaciones económicas de IPS.
Según Carmen Marín del Viceministerio de Economía de Hacienda, en tan solo cinco años tres sectores deficitarios -policías, militares y maestros- generaron un déficit de U$S 813 millones, por lo que las jubilaciones de docentes se sostienen en otros superávits y las de militares y policías con impuestos.
“Hay que hacer una reforma profunda de los programas de la caja fiscal pero también debe convertirse en una caja provisional y generar reservas como lo hace IPS, que gracias a las inversiones tiene U$S 1.800 millones de respaldo”, añadió Halley.
Para Halley, es necesario que la caja fiscal tenga reformas cuanto antes porque de lo contrario las jubilaciones y pensiones terminarán financiandose con impuestos, mientras que a nivel nacional se debería pensar en crear un sistema de seguridad social porque en la actualidad no se cuenta con uno que comprenda la protección y la previsión. “Personalmente no estoy de acuerdo con que ninguna caja se apoye en impuestos. Nuestra matriz tributaria no está preparada para eso y si ahora ya se está financiando las cajas de los militares y los policías, no es correcto”, indicó Halley.
Por otro lado, en lo que compete a IPS, Halley agregó que el contexto de esta institución es diferente a otras cajas porque es de naturaleza abierta, es decir, todos los trabajadores dependientes pueden ingresar a ella. “Los aportes pueden aumentar ya que ahora solo 3 de cada 10 trabajadores está en el sistema por la alta informalidad, lo que crea para nosotros una reserva demográfica importante que se suma a la gran reserva financiera que tenemos”, acotó Halley.
Si bien Halley no considera apropiado financiar jubilaciones con fondos estatales, existen posturas distintas que admiten que el presupuesto general debe apoyar a la seguridad social. Uno de ellos es Víctor Báez Mosqueira, secretario general adjunto de la Confederación Sindical Internacional, que afirmó que cobrar impuestos progresivos a sectores muy grandes de la economía es válido para invertir más en seguridad social.
“La presión tributaria de nuestro país es solamente de 10%, entonces ahora ese dinero no da para hacer las contribuciones y políticas de cobertura universal”, mencionó Báez. A su criterio las cajas como la bancaria, la de la Ande o la de Itaipú son débiles por tener pocos afiliados, entonces lo ideal sería unificarlas en un solo sistema para aumentar los fondos y favorecer a aquellos que cambian de caja de contribuciones al migrar laboralmente.
“En Paraguay no se puede conservar aportes que se realizaron en cajas independientes si es que un bancario va a otro sector, no se le reconoce lo que contribuyó. Me parece urgente unificar los aportes para que esto deje de ocurrir”, apuntó Báez.
Caja de IPS debe aumentar matriz
Específicamente sobre la caja del IPS, Báez recomendó que ingrese más gente al sistema, porque de lo contrario aumentarán los años para conseguir la jubilación y eso no lo considera factible. “Supongamos que se establezca la jubilación a los 70 años, el primer problema es que gente con edad avanzada tendrá que trabajar más y lo siguiente tiene que ver con el ingreso de los jóvenes a la vida laboral, que se verá afectado”, explicó.