Según Muñoz, la decisión de instalar la fábrica en Paraguay no fue casualidad. El CEO indicó que factores como la estabilidad económica, un marco legislativo favorable y la disponibilidad de un capital humano calificado fueron factores fundamentales para el proyecto. “Lo que vimos fue un entorno eficiente para traer tecnología de última generación. Además, hemos creado lazos humanos tan profundos que nos sentimos como en casa”, destacó.
La planta, equipada con maquinaria diseñada y patentada por la propia Molecor, establece un estándar global en producción de tubos de PVC-O. Este material, conocido por su resistencia y eficiencia, es utilizado en redes de agua potable y saneamiento. “La tecnología es exclusiva, no se puede comprar en el mercado, y su diseño cumple con los más altos estándares europeos”, explicó Muñoz.
Actualmente, la fábrica emplea indirectamente a 150 colaboradores y directamente a 25 personas, de las cuales 12 son operarios de maquinaria y 13 pertenecen al área administrativa. La planta opera durante las 24 horas del día, distribuyendo su personal en turnos que cuentan con cuatro operarios presentes en cada turno para garantizar el funcionamiento continuo. Además, los obreros recibieron capacitación especializada en la sede central de Molecor en España, asegurando el dominio de la tecnología de última generación instalada.
La nueva planta está preparada para mantener una producción de 3.000 toneladas de plástico anuales y con potencial de expansión para llegar hasta las 12.000 toneladas anuales. También se resalta el sistema de molienda y reciclaje que refuerzan el compromiso de la compañía con el medioambiente.
Si bien los directivos de la empresa señalaron que la planta abastecerá con creces el mercado local, también dijeron que tienen una clara vocación exportadora. Con una ubicación privilegiada, Villeta permitirá a la empresa enviar productos al norte de Argentina, Bolivia y otros mercados sudamericanos.
En cuanto al mercado local, Molecor busca contribuir al desarrollo de infraestructura crítica en Paraguay. “El país necesita modernizar sus sistemas de agua potable y saneamiento. Estamos preparados para aportar nuestra tecnología a proyectos como el Acueducto del Chaco o mejoras en distintas ciudades como Asunción y Ciudad del Este”, señaló el CEO.
Con esta planta, Molecor fortalece su posición en América Latina y refuerza su compromiso con la sostenibilidad y la innovación. De cara a 2025, la empresa proyecta su participación en grandes obras de infraestructura, consolidando su rol como un actor destacado en el desarrollo de la región.