Durante la presentación del prototipo, las personas admiraron el diseño, pero algo muy destacado fue la Media Bar, para la comunicación entre la movilidad y las personas. Se trata de una interfaz de nueva era que permite que la movilidad inteligente se exprese a las personas que la rodean, creando una relación interactiva, incluso antes de subir a bordo.
Por otra parte, el concepto de movilidad de Afeela se basa en la autonomía, aumento y afinidad. Y más allá de la dinámica de conducción y performance, se enfocan en el software, la conectividad y la experiencia del usuario.
El exterior del vehículo incorpora un Media Bar, con lo cual es posible compartir varios tipos de información, además ostenta un diseño minimalista con líneas que recuerdan a una nave espacial. En cuanto a su interior también va por lo simple, y un tablero compuesto por una pantalla panorámica y una cabina amplia, hecha por materiales de bajo impacto ambiental.
Y una mención especial en relación con la seguridad, puesto que se fijan altos estándares combinando la tecnología de sensores de Sony y la seguridad de Honda. Es así que se proponen desarrollar tres niveles de conducción autónoma para condiciones específicas, así como asistencia de conducción en un entorno urbano.
El Afeela incorpora 45 cámaras y sensores en su interior y exterior, junto con un chip de 800 billones de operaciones por segundo (TOPS) de Qualcomm. Así también dispone de un SoC (centro de operaciones de seguridad) de Snapdragon Digital Chassis, una solución integral que ofrece experiencias de movilidad personalizables y seguras.
Las cámaras y sensores monitorean 360 grados y además desarrollan una navegación AR en tiempo real para mejorar la experiencia de conducción. Por otro lado, gracias a los sensores, a medida que uno se acerca al automóvil, la puerta se abrirá, y una vez dentro, los sensores reconocerán quién subió para configurar el modo de conducción.
Los creadores de Afeela sostuvieron que el objetivo principal del vehículo fue convertir el espacio de la movilidad en un espacio emocional y de entretenimiento. Para ello, integraron el mundo real con el virtual y sobre todo con la integración de las posibilidades de entretenimiento a través del metaverso.