“La idea de lanzarnos al mercado gastronómico nació debido a la escasez de opciones que teníamos en la región. Sabemos que muchas personas sentían la falta de tener un lugar lindo, acogedor y con buena comida para ir a desayunar o merendar”, dijo Gabriela Justus, propietaria.
Gabriela mencionó que el nombre surgió luego de un viaje a Francia en época de mandarinas. “Como hacía frío y las ciudades estaban grises, el naranja vivo de la mandarina resaltaba en cada esquina y cambiaba todo el panorama. Como optamos por seguir el estilo francés de gastronomía acabamos recordando esas imágenes y elegimos el nombre Clementine, que sería mandarina en castellano”, señaló.
Clementine produce prácticamente todo lo que utilizan en los platos y en los postres, desde los panes, croissants, yogurts, helados, mermeladas y compotas, lo que hace que tengan un mayor control de calidad. “Gran parte de las hojas verdes y frutas que empleamos vienen de nuestras huertas, por lo que el sabor de los postres, helados y mermeladas siempre van de la mano con las frutas de la estación”, agregó.
El local cuenta con una carta fija de salados, platos dulces y bebidas que van desde los populares Croque Madame o el Avo Toast con pan de campo de masa madre, hasta un Croissant Caprese (el mejor de la ciudad) y el Iced Cappuccino con crema de chocolate. “Recientemente cambiamos nuestra carta y se sumó una gran variedad de cafés fríos, milkshakes y jugos naturales pensando en el verano que llega. En cuanto a nuestra pastelería, las opciones varían todos los días, de manera que siempre haya algo nuevo que probar”, expresó Gabriela. Hay para todos los gustos.
Allí también se puede disfrutar de opciones muy elaboradas, como los entremeses; otras más tradicionales como el crumble de manzana o la cheesecake, y los más sencillos que nunca fallan, como el budín de mandarina marmolado, torta de zanahoria con brigadeiro o la torta red velvet. No hay que dejar de probar el Turkey egg, un plato que recién lanzaron y que se volvió uno de los más vendidos, el milkshake de matcha también está increíble, así como los macarons de diversos sabores, que están siempre disponibles.
“Nuestros platos y bebidas son totalmente elaborados en el momento, por lo que no comercializamos fuera del local. En lo que respecta a panadería sí, proveemos panes y croissants a algunos cafés de la ciudad y la idea es expandirnos cada vez más en ese segmento”, anunció.
También están creciendo bastante en el área de tortas, canastas y regalos, no solo en la región como también en Asunción y Encarnación, según comentó la propietaria. “Nuestras cajitas de macarons están siendo muy solicitadas como souvenirs de eventos como lanzamientos de marca, casamientos, fiestas de 15, bautismos y otros eventos”, destacó. “Ahora ya nos estamos dedicando a hacer las pruebas para los regalos de fin de año que estimamos lanzar a comienzos de noviembre”, adelantó.
Este emprendimiento gastronómico es ideal para aquella persona que busca novedades, que le gusta lo tradicional, pero necesita algo novedoso y arriesgado de vez en cuando. Que tiene la cabeza abierta y está siempre dispuesto a probar los diferentes productos que lanza frecuentemente Clementine.
Más datos
Clementine se encuentra sobre la avenida José Asunción Flores, en el Paraná Country Club, Hernandarias. Informes al teléfono (0985)383-799. Seguiles en el Instagram @clementinecafe.py