El versátil 737-8 posicionará a JAL para fortalecer su red nacional y regional a medida que el tráfico de pasajeros continúa volviendo a los niveles previos a la pandemia. JAL tiene la intención de comenzar a introducir los aviones en su flota a partir del 2026.
“Estamos encantados de seleccionar el Boeing 737-8, miembro de la última familia 737 MAX, para reemplazar a nuestros Boeing 737-800, que constituyen la mayor parte de la flota del Grupo JAL. Esperamos poder transportar a nuestros pasajeros con la máxima seguridad y comodidad y acercarnos a nuestros objetivos de neutralidad en carbono para el 2050, gracias a una combinación de estas aeronaves súper eficientes, innovaciones operativas y nuevas tecnologías de ahorro de combustible”, dijo Yuji Akasaka, presidente de JAL.
El 737 MAX proporcionará a JAL una mayor autonomía y eficiencia de combustible, reduciendo tanto el uso de combustible como las emisiones de carbono en un 15 % en comparación con los aviones que la aerolínea está reemplazando. Además, el 737 MAX es un avión más silencioso, que genera una huella de ruido significativamente menor que los aviones a los que reemplaza.