En ese sentido, el economista Víctor Pavón explicó que en los últimos años el uso de medios de pago electrónico en Paraguay tuvo un descenso, pero también que las transacciones experimentaron un crecimiento significativo, con un aumento del 80%. Este incremento refleja una mayor confianza en las transacciones, impulsada tanto por la seguridad como por la comodidad que ofrecen. Las entidades financieras, conscientes de esta tendencia, han reforzado sus sistemas, brindando mayor conectividad y adaptándose a la demanda de servicios rápidos y accesibles.
Al analizar el acumulado de enero a septiembre de los últimos tres años, se observa que en 2024 se registró el menor desempeño, aunque ya desde el ejercicio previo se percibía un relativo menor dinamismo de este tipo de transacciones. Este comportamiento se debería, en parte, a que los agentes estarían optando por otras formas de pago, como las transferencias.
En cuanto al tipo de operaciones, las que se incrementaron de manera consistente a lo largo de 2024 fueron los pagos de facturas, cuyo monto creció más del 16%, mientras que la cantidad aumentó un 13%. Las demás transacciones, incluyendo el cash out (efectivización del dinero electrónico) y el cash in (inserción del dinero al sistema), que son las operaciones de mayor incidencia, han registrado bajas en sus volúmenes.
"Las personas valoran la rapidez de las transacciones, que ahora pueden realizarse sin la necesidad de desplazarse físicamente. La pandemia contribuyó a acelerar esta adopción, pero es la transparencia y la garantía de seguridad de las operaciones lo que consolidó el uso de las transferencias. Además, los sistemas de protección que aseguran la devolución en casos de transacciones erróneas aumentan la credibilidad del sistema, a diferencia de las billeteras digitales o los giros", indicó Pavón.
Es así que el sector enfrenta desafíos. Las fluctuaciones económicas recientes, influenciadas por factores como la escasez de divisas y los precios de commodities, afectan las operaciones de cash in y cash out. La falta de estabilidad en algunos sectores, como el agropecuario, ha generado una ligera disminución en la actividad financiera en general.
Para contrarrestar estas variaciones, "las empresas de medios de pago electrónico podrían implementar campañas de marketing más inclusivas, que promuevan el uso de sus servicios entre la población de ingresos medios y bajos, quienes aún muestran cierta resistencia hacia estos métodos. La penetración del smartphone en casi toda la población paraguaya es una oportunidad para democratizar el acceso y fomentar la adopción de este tipo de pagos en sectores menos bancarizados", mencionó Pavón.