“La Sacristía es una vinoteca en donde tenemos vinos con alma, con historias. Cada una de las botellas que tenemos aquí tiene algo que contarnos, un porqué están aquí”, comentó Mauri Benítez, Sommelier y propietaria de este emprendimiento.
“Además, tenemos una pequeña sala de catas donde nos dedicamos a experimentar, investigar y jugar con los aromas y sabores. Y una tienda de vinos especializada en vinos españoles. En La Sacristía uno se sentirá libre de sacar la máxima esencia a los vinos y la gastronomía”, manifestó.
VINO DE JEREZ
El vino de Jerez es la especialidad de la casa; su crianza, su velo de flor, la zona y el suelo, la hacen destacarse del resto. “De entre todos los milagros con los que el mundo del vino es capaz de sorprendernos, el velo de flor es uno de los que más admiración despierta, y solo existe en Jerez”, explica la Sommelier.
Si bien algunas personas afirman que el sabor por el Jerez es un gusto adquirido, la experta cree que realmente es una experiencia para aquellos que no lo han probado, “todo un desafío para la gastronomía paraguaya porque es la primera vez se dispone de ese tipo de vinos en Paraguay”, resaltó.
Para la propietaria del lugar, buen vino es aquel que representa a su zona y el Jerez tiene esa capacidad. “Son vinos diferentes, eso es cierto, vinos que tienen un aroma diferente y a veces los colores son distintos. La satisfacción de terminar comprendiéndolos es grande”, agregó.
VINOS EXCEPCIONALES
Mauri nos explicó que la casa cuenta con una gama de vinos de Bodegas Barbadillo. “Esta empresa tiene 200 años, pero en todo ese tiempo se ha mantenido siempre en la cresta de la ola en innovación en curiosidad, en el desarrollo de los nuevos productos. Desde el vino base, indispensable para la compresión de la gama, Castillo de San Diego, 100% Palomino de suelos de albariza, un punto intermedio que es Mirabras, también Palomino. Manzanilla Pasada Pastora de 15 años, Amontillado Príncipe, Oloroso Cuco, el mítico Palo Cortado, Pedro Ximenez La Cilla, Medium San Rafael, Moscatel Laura, son otros imperdibles”, recomendó.
En La Sacristía también vas a encontrar un tinto de Bodegas Barbadillo, “que es uno de nuestros favoritos”, dice Mauri. Además, Nude, 100% Tintilla, “una uva que estaba casi desaparecida y lograron recuperar. La crianza es inexistente, incluso el vino no se filtra, por eso encontramos sedimentos que nos muestran el trabajo tan real de la bodega con este vino, algo que lo vuelve sumamente interesante”, señaló.
Otra bodega que se puede encontrar en la vinacoteca es Maximo Abete. “Traemos 4 etiquetas cada uno con una historia. Mantienen la idea de que el vino viene de la viña, por eso la viticultura es el pilar fundamental en todo su trabajo. Ellos mismos trabajan su viñedo y lo hacen de forma natural y sostenible, respetan el proceso biológico para que las vides encuentren un equilibrio natural con el terreno”, cuenta Mauri.
“Son expertos en garnachas. Tienen una hermosa historia de vida, en la que te hacen amar su tierra sin siquiera estar ahí. En sus copas uno bebe la baja montaña de San Martín de Unx, Navarra”, cuenta. “Los vinos son las uvas, pero también son las personas que los hacen y Maximo Abete es un claro ejemplo del amor a la tierra y al vino”, declaró la experta.
UN LUGAR IDEAL PARA LOS AMANTES DEL VINO
En La Sacristía descorchan una botella por semana para quien quiera ir probando las distintas etiquetas que la casa ofrece. “Me parece muy importante que el amante del vino pueda conocer lo que compra, se interese por ello y lo disfrute, principalmente”, afirmó la propietaria.
De ahí nace la “Sala de Catas”, un lugar en donde uno puede ir a degustar y aprender sobre los vinos. “Es totalmente blanca y acondicionada, cuenta con 18 lugares, cuidadosamente ubicados para que todos disfruten de la cata. Aquel que es curioso, termina queriendo los vinos de estas zonas, buscándolos y defendiéndolos”, finalizó Mauri, invitando a todos a conocer este maravilloso lugar.
DATOS
La Sacristía se encuentra en Moisés Bertoni 1865. Consultas al 0971 620321 o al correo lasacristiapy@gmail.com.