El segmento más destacado es el de los televisores ultra grandes, con un tamaño igual o superior a 75 pulgadas, estándar que compone el 52% del número de aparatos vendidos por la firma en todo el mundo. Además, Samsung también logró una participación de mercado de 44,2% en el sector de televisores premium, los que cuestan más de US$ 2.500.
En 2019, Samsung lanzó su nueva categoría de televisores, los QLED 8K con 33 millones de píxeles. Lo último de la marca viene en presentaciones de 65, 75 y 85 pulgadas, posee funciones específicas responsables de la calidad de imagen como: 8K resolution, capaz de producir picos de brillo de hasta 4.000 nits, una cualidad que anteriormente era exclusiva para dispositivos profesionales de la industria cinematográfica.
Según Edgar Kato, gerente senior de TV para América Latina, la compañía está en constante crecimiento con sus tecnologías y está mejorando funciones ya exitosas en los televisores, lo que hace que el consumidor confíe en la marca.
“Nuestros consumidores exigen tecnología que haga la vida más fácil y divertida, y también reconocen el nivel de calidad que ofrece Samsung. Siempre tratamos de presentar innovaciones que marcan la diferencia en la vida cotidiana de las personas que adquieran un televisor Samsung, y creo que esto es lo que ha recibido el público fiel a nuestra marca”, manifestó.
Igualmente, conforme al informe tecnológico “Public displays market tracker”, también de IHS Markit, Samsung representó un 25,8% del mercado global en cuanto a ventas de señalización digital multimedia en 2018, por lo que de igual forma mantiene su liderazgo a nivel mundial en este sector desde el 2009.