"La finalidad de esta medida es priorizar el transporte de productos de primera necesidad, para fortalecer el abastecimiento de los comercios y acercar los insumos necesarios a los centros médicos que se están preparando para la contingencia sanitaria. Y en casos de transporte de otros productos, no urgentes, la medida es reprogramar las actividades para las siguientes semanas, cuando las condiciones sean más propicias".
Ramos indicó que esto no representa una merma en la movilidad de los camiones, sino que se trata de una migración a sectores prioritarios. El transporte de granos mermó en un 50% en las últimas semanas, por la situación del covid-19, por eso, existe una flota de camiones disponibles para el traslado, subrayó.
El directivo precisó que el 60% de los camiones en circulación están asociados a la ACP, y que todos estos se rigen por un estricto protocolo sanitario. El procedimiento les indica que deben desinfectar los camiones antes de cada viaje, así como que los conductores deben utilizar elementos como guantes y tapabocas en los contactos, y disminuir al mínimo el contacto con otros operarios, detalló.
"Si algunos miembros de la Asociación deciden no ejercer sus labores por las medidas de aislamiento social, o algunas industrias exportadoras deciden suspender sus actividades, se tendrá una merma en los ingresos del sector camionero. Pero independientemente a esto, tendremos flota suficiente para abastecer la demanda".
A consecuencia de las dificultades que se vivieron en el sector cárnico y en el sector sojero en 2019, referentes confirmaron que se dejó de percibir cerca de US$ 60 millones en el transporte de productos.
“Esta situación es bastante inusual y sucede en un momento donde ambos sectores estaban retomando con normalidad sus actividades. Por eso, aún es precipitado hablar de números concretos”, concluyó Ramos.