El titular mencionó que el sector siente los efectos de la desaceleración económica y, que están preocupados por el ingreso de productos argentinos de contrabando.
El panorama del sector lácteo no es el más favorable, ya que además del descenso de consumo de productos nacionales, se debe tener en cuenta que Argentina quitó el impuesto al valor agregado (IVA) a los productos de esta categoría –lácteos–, volviéndolos más baratos, recordó Ecker.
Resaltó que hasta el momento manejan la caída de 5% en las ventas, aunque con la fuerte presencia de contrabandistas, podría incrementar el ingreso de productos ilegalmente, lo que afectaría considerablemente a las industrias nacionales que invierten constantemente en el rubro lechero.
“Incluso en ocasiones son las mismas sociedades, que realizan estas ventas paralelas, que luego terminan ingresando como contrabando. Por ende, es complejo afrontar la situación, porque no se puede competir simplemente mejorando los precios, sino que son varios los aspectos a examinar”, reconoció.
Sobreproducción nacional
Por otro lado, Ecker informó que en el sector procesa 2.400.000 litros de leche por día, que son 400.000 litros más que años anteriores. Esto se debe al buen precio que se está abonando a los productores, quienes hacen llegar su materia prima a las industrias, admitió.
“Tenemos una sobreproducción de leche, debido al interés que tienen los productores en el rubro, y como el mercado se encuentra retraído, tenemos que exportar en mayor cantidad a distintos países, a un menor precio. Por eso, considero que tarde o temprano esta mala situación podría afectar al productor”, advirtió.
El presidente comentó que principalmente se exporta leche en polvo, aunque destacó también el envío de productos larga vida (leches) y frescos (quesos y mantecas) a países como Brasil, Líbano, Rusia, Bolivia, entre otros.
Como es habitual, ahora que comenzó la etapa de calor, disminuirán los precios de los productos por la sobreproducción, y “se va a empezar a mover el índice de consumo para arriba”, aseguró.
“Aún no llegamos al consumo per cápita que recomienda la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), que es de 180 litros de leche y sus variedades (por año), en Paraguay solamente se consume entre 125 y 130 litros anuales”, declaró.
Limitar la importación
El directivo de Capainlac recalcó que están trabajando para que exista un límite para la importación de productos lácteos, o al menos que exista una reciprocidad comercial con el país que envía su producción. Como ejemplo, Ecker indicó que, si Argentina quiere enviar 1 tonelada de queso, entonces Paraguay también puede enviar la misma cantidad a este mercado.
“Que ya no se traiga indiscriminadamente (productos lácteos) como se está haciendo. Esta iniciativa tiene el apoyo del Ministerio de Agricultura y Ganadería (MAG), y está siendo analizada por el Ministerio de Industria y Comercio (MIC). Se tiene la percepción errónea, que se importa solamente los productos especiales que no se producen acá, y eso no coincide con la realidad, ya que se traen productos convencionales, en grandes volúmenes, como quesos sándwich o mozzarella que se importan en un volumen de 4.000.000 de kilos por año”, manifestó.
Por último, agregó que si se logra implementar eficientemente el programa de un vaso de leche para los estudiantes en todos los departamentos, esto permitirá una inyección monetaria al rubro.