Todos los días, de lunes a viernes de 12:00 a 15:00, y sábados y domingos de 11:00 a 16:00, el Comedor Ña Ñeca abre sus puertas para los comensales. “Abrimos como copetín en 1992, después de retirarme del lugar donde siempre trabajé como cocinera, en el Hotel del Lago de San Bernardino. Empecé con muchas esperanzas y la verdad es que me está yendo bien", aseguró.
Desde sus inicios, el sello del Comedor Ña Ñeca fue ofrecer comida casera, como los ñoquis, tallarines, ravioles, canelones y otras variedades de pastas. Tal vez el plato más requerido es la "Milañeca", que es la milanesa con ñoquis, exclusivo de la casa.
"Digamos que nos está yendo bastante bien, con todos los altibajos que caracterizaron a este año", manifestó Ña Ñeca, cuyo comedor es uno de los más concurridos del departamento de Cordillera, sobre todo cuando el turismo interno incrementa.
Según la propietaria, gente de todo el país llega al local en esta época, atraída por el boca en boca, incluso extranjeros. “Recibimos gente de México, Estados Unidos, Argentina, Brasil, Colombia, Japón y Corea", citó.
Su popularidad radica en que sus platos conservan el sabor de la cocina hogareña y sus porciones son generosas. Además, Ña Ñeca aseguró que siempre procuran mejorar el servicio del comedor. Y si bien recibe a muchos clientes, ella no tiene pensado abrir sucursales, al menos por el momento, porque parte de la esencia del Comedor Ña Ñeca es estar en Altos, en el lugar de siempre.
Para Ña Ñeca, los platos servidos recuerdan a la cocina de las abuelas, además de tener el plus de encontrarse en el polo veraniego del país, cerca de San Bernardino, pero en una zona tradicional de la ciudad de Altos.
Las expectativas de Ña Ñeca para el 2024 son auspiciosas, sin embargo, la propietaria desea que a todo el rubro gastronómico le vaya bien, teniendo en cuenta los duros momentos que vivieron a causa de la pandemia.