Uno de los ejes centrales de la charla de Mitre fue el liderazgo, un tema que aborda desde una perspectiva humana y transformadora. “En nuestra cultura, muchas veces se prioriza el cargo por encima de la esencia del liderazgo. Ser gerente o supervisor no garantiza que tengas la capacidad de liderar. El liderazgo no es una posición, es la habilidad de impactar positivamente en las personas y ayudarlas a crecer”, afirmó.
Agregó que en Latinoamérica predomina el “liderazgo ausente”, donde el jefe se enfoca en su posición sin construir relaciones sólidas con su equipo. A este modelo se le suma el “liderazgo transaccional”, que opera bajo un sistema de recompensas: “Si cumplís el objetivo, te doy un día libre; si lográs tal cosa, obtienes otra”.
Sin embargo, el verdadero desafío, según Mitre, está en construir un “liderazgo inspirador”. Este modelo prioriza el desarrollo de las personas y fomenta una cultura de confianza, propósito y compromiso. “Un líder inspirador entiende que su rol principal es formar a su equipo para que cada miembro alcance sus metas. Cuando lográs esto, el impacto en los resultados es exponencial”, aseguró.
En su experiencia como consultor, Mitre ha identificado un patrón recurrente en las organizaciones: la carencia de habilidades de gestión en los líderes. “Llevo 25 años entrenando equipos, principalmente comerciales, y siempre empiezo con un diagnóstico. Les pregunto a los mandos medios y altos si están preparados para equilibrar tres roles clave: la autoridad formal, el entrenador y el líder. La realidad es que pocos lo están”, afirmó.
La falta de preparación en estas áreas genera líderes frustrados que no saben cómo manejar a sus equipos. “Es común escuchar a jefes decir que su equipo no está comprometido o no logra resultados, pero se olvidan de algo esencial: el equipo es un reflejo de su líder. Si el líder no está capacitado, difícilmente podrá guiar al grupo hacia el éxito”, señaló Mitre.
Para Mitre, la capacitación no es un lujo, sino una necesidad. “Los equipos necesitan líderes que sean ejemplos de aprendizaje y evolución. Un líder que invierte en su formación mejora su desempeño e inspira a su equipo a hacer lo mismo. Esa es la base de un equipo de alto rendimiento”, destacó.
En el contexto actual, donde los cambios en el mercado son constantes, la formación y la adaptabilidad son herramientas indispensables. “La preparación no es solo técnica, también es emocional. Un líder debe saber conectar con las personas, entender sus motivaciones y guiarlas hacia objetivos comunes. Eso no se logra con títulos, se logra con compromiso y formación continua”, subrayó.
La participación de Guillermo Mitre en EXMA Paraguay dejó un mensaje claro y profundo: el futuro del liderazgo no se basa en jerarquías ni recompensas, sino en la capacidad de inspirar y transformar. “El liderazgo inspirador es el puente hacia la transformación empresarial. Es el motor que impulsa a los equipos a superar desafíos, innovar y alcanzar resultados sostenibles”, concluyó.
EXMA Paraguay, con su enfoque en el aprendizaje y la innovación, fue el escenario perfecto para que Mitre compartiera su visión y experiencia, dejando una huella en quienes buscan llevar sus organizaciones al siguiente nivel.