Esta innovación se sostiene sobre casi cinco décadas de investigación de Nike y marca un antes y un después en el concepto de indumentaria adaptable. La tecnología detrás de esta prenda se llama AIR (Adapt. Inflate. Regulate.) y funciona como un sistema de control térmico personalizado.
¿Cómo funciona?
Al activar el sistema, la campera puede pasar de sentirse como una sudadera liviana a brindar el abrigo de un pluma media, todo en segundos. El aire circula entre cámaras internas distribuidas estratégicamente, generando calor cuando se infla y liberándolo cuando se desinfla.
Este desarrollo no solo es técnico, también es estético. Nike combinó materiales laminados de doble capa, diseño digital 3D y modelado computacional para crear una silueta dinámica y cómoda. Cada línea, volumen y costura fue pensada para direccionar el aire de forma precisa según el movimiento del cuerpo.
“Air Milano marca una nueva era en el legado de Air. Es una prenda reactiva que combina la ciencia del atleta con el diseño basado en datos”, explicó Danielle Kayembe, experta en innovación de producto de Nike.
Probada en nieve, montaña y laboratorio
La campera fue testeada durante más de 380 horas en Colorado, en escenarios tan cambiantes como rutas de ciclismo de montaña y paisajes nevados. El objetivo era comprobar su eficacia ante distintas intensidades de esfuerzo, sin sacrificar ligereza ni libertad de movimiento.
Air Milano también se integra al ecosistema Nike FIT, que reúne otras tecnologías de la marca: Therma-FIT - aislamiento térmico
Aero-FIT - ventilación avanzada
Dri-FIT - control de humedad y sudor
Storm-FIT - protección ante viento y lluvia
Una aparición olímpica
La presentación oficial tendrá un escenario estratégico: los atletas del equipo de Estados Unidos la usarán este invierno en Milán, durante ceremonias de entrega de medallas. Cada campera incluirá detalles exclusivos como: Bomba ACG metálica personalizada para inflar/desinflar; logotipos pulidos; forro interno inspirado en el Jardín de los Dioses de Colorado, y accesorios inclusivos, como cremalleras magnéticas y presillas internas para los pulgares, pensadas también para atletas paralímpicos.
Nike ya había coqueteado con la idea de ropa inflable en los años 2000 con la ACG Airvantage, y más recientemente con el concepto experimental ISPA Adapt Sense Air. Pero con la Therma-FIT Air Milano, la marca define el punto más avanzado de su apuesta por prendas que respiran, reaccionan y evolucionan con el cuerpo. La pregunta ya no es si el aire puede amortiguar… sino si puede abrigar.