“Fue un proceso bastante largo. Desde hace 12 años trabajamos en el proceso de la denominación de origen, a nivel local. Esto abre las puertas para que otros productos puedan contar con dicha denominación y certificarlos como auténticamente paraguayos, ya sean o no de origen agrícola”, expresó Juan Barboza, titular de la Capaste.
Existían otros países que estaban impulsando la denominación de origen de la stevia, pero luego de ser comprobada su procedencia oficial, el segundo paso es presentar este certificado a mercados internacionales, para que se lo reconozca como tal.
“Hace aproximadamente dos años estuve por Europa para conseguir la denominación de origen internacional. Pero para lograr esto necesitábamos primero recibir la denominación de origen nacional. Ahora que ya la tenemos, es cuestión de tiempo”, aseguró. El certificado de denominación de origen es otorgado por la Dirección Nacional de Propiedad Intelectual (Dinapi).
Entre la presentación de la documentación a las autoridades máximas del segmento, se estima que para 2019 se contará con la aprobación de la denominación internacional.
Beneficio
“Esto generará un gran impulso en la producción de stevia en nuestro país, y sin duda alguna aumentará considerablemente la demanda, porque siempre es preferido un producto que cuenta con denominación de origen, lo que representa como un certificado de calidad, que inspira confianza en el consumidor”, detalló Barboza.
Este hito va a influir de manera positiva en toda la cadena de la stevia, porque se consolidarán todas las áreas que engloban el mercado, desde los productores (pequeños, medianos o grandes) hasta las plantas que comercializan el producto industrializado.
Calidad
Según el presidente del gremio, la stevia paraguaya tiene grandes diferencias en cuanto a la calidad final. Por ejemplo, el dulzor de la planta local es superior en comparación a las cultivadas en otros países. Aquí la stevia alcanza un dulzor de entre 14% a 16%, mientras que otros países llega a los 4% a 6% aproximadamente.
Además, aquí se puede producir cuatro cosechas por año, en cambio en otros países solamente pueden hacer entre una a dos cosechas anuales.