Cuando hablamos de una compañía referente de la industria cervecera, pensamos en Cervepar, que comercializa 17 marcas en el mercado local. Algunas de estas son: Pilsen, Brahma, Ouro Fino, Baviera, Corona, Stella Artois, Patagonia, Budweiser.
“El 97% de nuestras marcas son de producción nacional. Nuestro principal desafío a nivel interno es adaptarnos a un mundo cada vez más cambiante. Estamos convencidos de que lo que nos trajo hasta acá, no nos va llevar al futuro que queremos construir para los próximos 100 años de nuestra compañía. A nivel externo, trabajamos en un ámbito muy competitivo en donde demostrar nuestras habilidades diferenciales tiene como recompensa la elección del consumidor informado y exigente”, indicó Fernando Torres, director de Asuntos Corporativos y Legales.
Torres apuntó que detrás de la elaboración y comercialización existen números relevantes en cuanto a la influencia directa e indirecta en la economía o sociedad, porque cuentan con 1.000 colaboradores (directos) en sus distintas áreas, y 25.000 de forma indirecta, que involucra a 45.000 comercios (a nivel país) que venden sus productos, servicios logísticos, entre otros.
“En un año complejo tomamos medidas audaces, por ese motivo desde hace un mes llevamos adelante una acción inédita en la industria de las bebidas, ajustando nuestros precios a la baja, en el orden del 13% del total del portafolio”, acotó Torres.
Esta medida responde como una alternativa a la desaceleración en el consumo y porque es necesario que los usuarios puedan adquirir las distintas presentaciones, con la misma calidad, a precios asequibles, recalcó.
También explicó que en los últimos años el consumidor fue modificando su paladar y ahora está más dispuesto a experimentar los distintos tipos de cerveza, por eso, desde la compañía se adecuan a la tendencia con el lanzamiento de ediciones especiales o nuevas líneas.
Como novedad, Torres comentó: “Abrimos las puertas de nuestra cervecería, ya que desde el año pasado tenemos habilitado el Tour de Pilsen, los sábados, para que los amantes de la cerveza puedan conocer el proceso de elaboración y envasado de nuestros productos y, al mismo tiempo, conocer más sobre nuestra historia”.
La medida artesanal
“El cervecero artesanal es quien cuenta con todos los permisos para comercializar sus productos en el mercado, ya sea en bares, restaurantes, supermercados, tiendas de conveniencia u otros puntos de venta”, recordó Álvaro Díaz, presidente de la Asociación de Cerveceros Artesanales y Caseros del Paraguay (Acerva).
Actualmente, los socios de la Acerva producen cerca de 70.000 litros mensuales de cerveza artesanal y con respecto a las cervezas caseras no tienen volúmenes concretos, porque más bien su producción tiene como destino el consumo propio (con familiares o allegados).
Acerva tiene unos 120 socios activos porque aglutina a productores artesanales y caseros. Dentro de su rama artesanal las marcas más conocidas son: Sacramento, Palo Santo, Herken, 7 Lomas, The Hop y Sajonia.
Díaz expresó que las personas están eligiendo las cervezas artesanales –o sitios donde las comercializan– porque tienen ganas de probar algo distinto y también por existe un mayor conocimiento de lo que gusta consumir.
Sobre los aspectos a tener en cuenta para que este segmento continúe creciendo, dio tres pilares vitales. Lo primero, educar a los consumidores y posibles consumidores sobre todo lo relacionado al producto (ingredientes, nivel de alcohol, cómo se elabora, historia del estilo, otros); lo segundo, mantener los altos estándares de calidad sin escatimar recursos en todos los procesos de elaboración y envasado; y el tercero es que los interesados en el área puedan invertir su tiempo-capital en la fabricación de cervezas e instalación de cervecerías o bares propios.
Además, en 22 días se realizará el 5to Concurso de Cerveceros Caseros y Artesanales, que busca que personas que producen, se presenten ante un jurado compuesto por referentes nacionales e internacionales, para competir en las distintas categorías.
Para esta edición esperan la presentación de 80 a 100 muestras de cerveza, que serán analizadas por un jurado especializado, encabezado por el norteamericano John Palmer, un ícono en el segmento.