Sin embargo, con la llegada del e-Vitara, Suzuki confirma su compromiso con la movilidad sostenible, apostando por una alternativa ecológica sin renunciar a la fiabilidad y accesibilidad que ha caracterizado a la firma nipona.
El nombre Vitara es sinónimo de historia dentro de la marca, y no es de extrañar que Suzuki haya decidido aprovechar esta denominación icónica para su primer vehículo completamente eléctrico. Tal como lo han hecho otras marcas, Suzuki le ha sumado la letra “e” para subrayar la naturaleza eléctrica del modelo, al tiempo que mantiene el legado de un nombre que ha conquistado durante décadas a los conductores.
El nuevo e-Vitara será lanzado oficialmente en Europa en el verano de 2025, aunque aún no se han confirmado los precios de salida. Lo que sí es cierto es que, más allá del nombre, este modelo presenta una serie de diferencias y mejoras en comparación con su antecesor de combustión.
Gracias a una nueva plataforma modular, desarrollada en colaboración con Toyota, el e-Vitara se beneficia de mayores dimensiones y una carrocería de formas más robustas y musculosas, que le otorgan un carácter más imponente y dinámico, en línea con las tendencias actuales del mercado.
Con unas dimensiones de 4,28 m de largo, 1,80 m de ancho y 1,64 m de alto, el e-Vitara se posiciona en la categoría de SUV compactos, con un diseño más amplio que el Vitara convencional. Su distancia entre ejes de 2,70 m promete un habitáculo más espacioso, lo que se traduce en mayor comodidad para los pasajeros y en un maletero más grande, aunque Suzuki aún no ha revelado cifras exactas.
El interior se ha renovado por completo, destacándose un salpicadero digitalizado con un cuadro de instrumentos completamente digital y una pantalla multimedia central, todo integrado en una única pieza que refuerza su modernidad.
El e-Vitara ofrecerá tres versiones con distintas configuraciones de motor y batería, para adaptarse a las necesidades de una gama más amplia de usuarios. Las versiones de entrada contarán con un motor de 144 CV y una batería de 49 kWh, mientras que la versión intermedia, con 174 CV, integrará una batería de 61 kWh. La versión más potente y equipada será la ALLGRIP-e, con 184 CV, tracción total y dos motores, uno para cada eje, lo que garantiza una mejor tracción, especialmente en terrenos difíciles.
Esta última opción, ideal para quienes busquen aventuras fuera del asfalto, incluye un programa Trail que simula un diferencial de deslizamiento limitado, permitiendo una mayor capacidad de tracción en condiciones de baja adherencia.
Con una autonomía de hasta 500 km, el e-Vitara se perfila como un contendiente serio en el segmento de los SUV eléctricos, destacándose por su capacidad para cubrir largas distancias entre recargas. Además, la tecnología de sus baterías LFP (litio-ferrofosfato) le otorga una gran fiabilidad y robustez, aunque con una menor densidad energética que otras tecnologías como las de NCM. Esto significa que las recargas podrían ser más lentas, pero a cambio de un menor costo y mayor durabilidad.
Este lanzamiento representa un paso significativo en la transición de Suzuki hacia la electrificación de su flota. Si bien la marca ha sido más conservadora en su enfoque hacia los vehículos eléctricos, el e-Vitara demuestra que está lista para enfrentar los retos del futuro.