Hurtado es ingeniero en marketing y fundador de la empresa social Livewalk Incorporated, se trata de un emprendimiento socio cultural que busca rescatar la memoria histórica de Panamá.
“Vinimos con la intención de compartir nuestros conocimientos en cuanto al mercado, un emprendimiento social puede verse desde muchas perspectivas, como desde el punto de vista del producto, del modelo de negocio, de la tecnología e innovación, desde el liderazgo y competencia. Nosotros venimos a hablar desde el marketing”, manifestó.
Hurtado resaltó que el marketing que ellos realizan desde su empresa responde a necesidades sociales y están en una constante búsqueda para que la oferta que realizan sea lo suficientemente atractiva, de manera a que la gente compre.
“En la exposición hablamos de los riesgos y obstáculos que pasamos en este nuevo nicho de mercado. La importancia del marketing social se da porque las nuevas generaciones cambiaron su mentalidad, desafían los esquemas tradicionales de la educación, los negocios y lo que nos une es la necesidad de humanizar lo que hacemos”, acotó.
Por otro lado, añadió que las nuevas empresas buscan tocar la “fibra emocional” de las personas, pero el marketing social, aparte de eso, desea sensibilizar a la sociedad sobre una problemática y dar a conocer que una empresa lo está abordando.
“La importancia del marketing social no es solo vender, sino que crear impacto por medio de la comunicación, que concientice a las personas. En nuestro caso es la historia, la cultura y las consecuencias, no se trata de vender, se trata de involucrar a la gente con una causa”, sostuvo.
Asimismo, Hurtado consideró que los espacios como Marketing Days son importantes porque el expositor no solamente desarrolla lo que conoce, sino que la dinámica está pensada para que sea un lugar de conversación donde el disertante también se retroalimente.
“De esta manera uno se da cuenta de sus falencias, carencias y de que necesita nuevas técnicas para continuar trabajando. Así también, otras personas aprenden de errores que otros cometieron”, reveló.
Por último, Hurtado asumió que el marketing durante muchos años estuvo desvinculado del ser humano y bastante centrado en el producto en sí, condición que debe cambiar para mejorar el bienestar social. “El marketing social tiene mucho que ver con la cultura, con la idiosincrasia, los valores, el ambiente y las aspiraciones”, concluyó.