Mersán de Gásperi refirió que los números acumulados de la balanza comercial registran una baja de las exportaciones a Brasil en un 19% con respecto al 2022, debido principalmente a la disminución de la exportación de energía, de maíz y de soja.
A su vez la balanza comercial está en un 8% menos al corte de setiembre, y se suma también la ralentización de la economía brasileña. “Esto hace que se reduzcan las exportaciones al vecino país”, explicó.
Consideró que el interés en invertir en Paraguay se acrecentó a partir del cambio de gobierno. “No podemos olvidar que es un año muy particular en el que Brasil tiene un nuevo presidente, Paraguay también y lo mismo Argentina el próximo domingo, que hace que las decisiones de los empresarios también queden supeditadas a qué pasará en sus países”, dijo.
Evaluó que ahora las fichas están mejor colocadas y hay un mayor interés en continuar invirtiendo en Paraguay por parte del capital brasileño. “No podemos dejar de mencionar que con las ventajas que tenemos en el marco impositivo, en las calificaciones de casi grado de inversión, la mano de obra joven, la energía eléctrica y el bajo costo de mano de obra, a nivel regional Paraguay es el mejor país para invertir”, expuso.
Por otra parte, citó que en el sector financiero el capital brasileño es muy fuerte y uno de los principales actores en la inversión extranjera directa, lo que posicionó a Brasil en el primer lugar en el 2022, con más de US$ 1.000 millones de inversión. También hoy el sector maquilador está exportando por más de US$ 1.000 millones.
“Yo creo que este año va a continuar en sumas similares o por encima. Y de todas esas exportaciones bajo el régimen de maquila, 56% tienen a Brasil como destino. O sea, estamos hablando de más de US$ 580 millones”, apuntó.
Aunque el gobierno brasileño redujo la carga impositiva, simplificando el sistema tributario, lo que fue de mucho agrado para el empresariado brasileño, eso no implicó una baja de la presión tributaria, ni tampoco la reducción de costos laborales que tiene Brasil.
“Entonces, Paraguay va a ser siempre un aliado para poder utilizar los regímenes especiales que tenemos y producir. Hay muchas fábricas que se instalan para producir sus bienes aquí y lograr acceder a otros países de Latinoamérica en condiciones más competitivas que las que tienen produciendo desde Brasil”, sumó.
En cuanto a las proyecciones para el 2024, aseguró que observan que será positivo. “Para el año que viene Paraguay va a estar en un número similar al de este año, quizá un poco menor. Pero la firmeza de la relación diplomática que existe entre ambos países, el interés de los empresarios brasileños en acercarse a Paraguay, creo que va a continuar creciendo”, dijo.
Agregó que desde su óptica se van a romper más récords aparte de la inversión extranjera directa. Al mismo tiempo, se mejorará la balanza comercial que en el 2022 fue de US$ 7.100 millones. “Creo que en el 2024 vamos a tener un importante repunte y también la instalación de más empresas bajo el régimen de maquila, que hoy ya superan más de 200”, remarcó.