“Desde hace una semana estamos recolectando las primeras frutillas correspondientes a las variedades tempraneras, hay un poco de Sweet Charlie, Dover y francesa. En mi caso particular estoy teniendo la variedad francesa, que se destaca por ser de frutas más grandes y de mayor peso, al igual que por su olor y sabor. Pero no todos los productores están cosechando, solo quienes plantaron las tempraneras”, comentó Raquel Gómez.
Si bien están sujetos al comportamiento del clima, los frutilleros esperan una producción más abundante para este 2023 en relación a la temporada anterior, cuando el rendimiento de los cultivos disminuyó a consecuencia de la sequía.
“Estamos expectantes y optimistas, la oleada más alta siempre es entre julio y agosto. La mayoría de los productores sembró este año y las plantaciones se encuentran en etapa de floración con buenas perspectivas, pero solo con el correr de los días vamos a poder estimar un volumen”, afirmó la coordinadora.
Gómez mencionó, además, que este año algunos productores participaron de una capacitación desarrollada en la ciudad de Corrientes, Argentina, con el objetivo de potenciar la producción del oro rojo nacional. El evento estuvo enfocado en el mejoramiento de las variedades, calidad y volumen de las frutillas.
“Nos ayudó porque gracias a lo aprendido, logramos mejorar mucho la producción en lo que respecta a la preparación del suelo, a la fumigación y al tratamiento en general, porque se trata de una fruta muy delicada que requiere muchos cuidados para que pueda fructificar de buena manera”, expresó.
Finalmente, la productora detalló que tienen previsto, como cada año, la realización de diversas actividades en la ciudad de Areguá. “Vamos tener como siempre, Coseche y pague y Fruti Kids, iniciativa dirigida a los niños, a partir del 25 de junio. Y luego, la primera semana de julio, se va a llevar a cabo una nueva edición de la Expo Frutilla, nos estamos preparando con todo”, enfatizó.