Aunque la legislación paraguaya reconoce la validez de los contratos verbales, en la práctica la ausencia de un documento claro y detallado puede abrir la puerta a malentendidos, incumplimientos e incluso pérdidas económicas. “En muchos casos, los problemas comienzan por la informalidad y la falta de precisión”, explicó Seiferheld.
Cláusulas esenciales que todo contrato debe incluir
Para ejemplificar, el abogado recordó el famoso “contrato en servilleta” que Lionel Messi firmó con el FC Barcelona cuando tenía 13 años. Aunque en ese contexto sirvió para sellar un acuerdo, en Paraguay un documento así sería insuficiente, ya que carecería de datos básicos indispensables: nombres completos, números de cédula, domicilio, objeto del contrato, plazos, formas de pago, penalidades, firma con capacidad legal y, en algunos casos, registro oficial.
“Un contrato comercial debe responder preguntas simples, pero realmente esenciales: ¿quiénes son las partes?, ¿qué se está contratando?, ¿a cambio de qué?, ¿en qué tiempo?, ¿dónde se cumple?, ¿qué pasa si alguien no cumple?, ¿cómo se resuelven los conflictos?, ¿quién firma y cómo?”, detalló Seiferheld. La ausencia de estas respuestas deja espacio para conflictos futuros.
Cuando un contrato está mal redactado o incompleto, se generan interpretaciones abiertas que, con frecuencia, terminan en tribunales. “He visto casos donde no definir el tipo de cambio en operaciones en dólares derivó en litigios millonarios”, advirtió el abogado. Por ello, recomendó que siempre se someta el documento a una revisión profesional que permita detectar riesgos que pueden pasar inadvertidos.
Otra cláusula que no puede faltar es la que regula la forma de resolver conflictos sin llegar a juicio. El arbitraje y la mediación, contemplados en la Ley N.º 1879/02, ofrecen alternativas más ágiles y confidenciales que los procesos judiciales tradicionales. Sin embargo, “no alcanza con mencionar el arbitraje: hay que definir la institución, el reglamento, la sede y el idioma para que la cláusula funcione realmente”, señaló Seiferheld.
Consejos para pymes y emprendedores
· No copiar contratos de internet: cada negocio tiene particularidades legales que requieren redacción propia.
· Establecer por escrito plazos, entregas, pagos y sanciones.
· Invertir en asesoría previa, que siempre es más económica que un juicio.
· Usar un lenguaje claro pero legalmente preciso.
La prevención, asegura el abogado, siempre resulta más barata que la reparación. Un empresario informado consulta antes de firmar para evitar sorpresas.
El riesgo de la “mafia de los pagarés”
Finalmente, Seiferheld advirtió sobre un problema frecuente: la llamada “mafia de los pagarés”. Estos documentos, si no se custodian o recuperan adecuadamente, pueden ser utilizados para cobranzas indebidas o falsificaciones. “Custodiar y recuperar los pagarés es la mejor defensa para evitar problemas legales y garantizar la seguridad jurídica”, concluyó.
Cada cláusula en un contrato comercial es una pieza clave para proteger derechos y prevenir conflictos. Como bien resume el abogado: “El mejor momento para consultar a un abogado es antes de firmar, no después de que surja el problema”.