“La recomendación para la ingesta de alimentos es preparar la mitad del plato con verduras, en especial las de hojas verdes: lechugas, perejil, albahaca, rúcula, acelga, berro, espinacas, repollo. También se pueden incluir zanahoria y remolacha. Nos aportan saciedad, vitaminas del complejo B y fibras, que son muy beneficiosas para la digestión y absorción de los nutrientes dentro del organismo”, recomendó Arturo Benítez, licenciado en nutrición y especialista en dietética clínica y soporte nutricional.
En cuanto a los hidratos de carbono, el profesional explicó que son los que aportan energía, por ende, deben ser consumidos en menor cantidad, porque son los responsables del aumento de peso.
“Si los consumimos en exceso y no practicamos ninguna actividad física, nos puede llevar a un sobrepeso u obesidad. Los tenemos en la sopa paraguaya, papas, mandioca, panificados en general, arroz, pastas. Deben ocupar una cuarta parte del plato, si nos encontramos en la mesa todos estos alimentos, debemos de probar una pequeña porción de cada uno”, agregó Benítez.
En cuanto al consumo de proteínas, el nutricionista sugirió consumir una cuarta parte del plato, que puede ser carne vacuna, cerdo, carne de algún tipo ave, pero seleccionando pequeñas porciones hasta llenar una cuarta parte al ras del plato.
A la hora de brindar
Por otro lado, acerca del consumo de bebidas alcohólicas, el nutricionista señaló que se debe tener en cuenta que todas las bebidas alcohólicas contienen calorías, por ejemplo, un vaso de cerveza (200 ml), una copa de vino, o un vaso de whisky tienen 140 kilocalorías. Remarcó que las personas deberían tratar de no excederse, porque si beben 10 vasos de dichas bebidas, ingresaría al organismo 1.400 kilocalorías.
Recalcó que el consumo de alcohol puede causar un inicio de deshidratación más fácilmente, debido a que es un diurético.
“Cuando el clima cálido se acompaña de un consumo excesivo de alcohol, la temperatura del cuerpo comienza a subir más rápido, que si no estuvieras bebiendo y también se tiende a sudar más, la transpiración ayuda a enfriar el cuerpo. Por tanto, el alcohol deshidrata aún más, porque hace orinar y transpirar más de lo normal”, dijo
Sobre la ingesta y mezcla de bebidas alcohólicas, puntualizó que las bebidas blancas (por ejemplo vodka, ginebra y vino blanco) mezcladas con las más oscuras (brandy, whisky, ron y vino tinto) pueden favorecer la irritación estomacal.
Otro punto importante es la mezcla de bebidas energizantes con alcohol, algo que se puso de moda en los últimos tiempos y que el experto sostiene que es muy perjudicial, debido a la cantidad de ingredientes estimulantes que contienen.
Y si no se tuvo éxito midiendo las porciones, la recomendación es hacer actividad física diariamente y beber preparados de jugos verdes, para desintoxicar el cuerpo. Además de equilibrar las porciones de los alimentos con un profesional y sobre todo beber siempre más de 2 litros de agua.